China auditará otros 28 frigoríficos de Brasil; abarcará todas las carnes

BARJW9 Slaughterhouse Facility meat export Mato Grosso State Amazon Brazil. Image shot 04/2009. Exact date unknown.

Brasil apura la apertura de más frigoríficos para mejorar su posición en China, que auditará otros 28 mataderos brasileños a través de la Administración General de Aduanas de China (GACC) para una posible autorización de exportación de carne vacuna, porcina y aviar. La inspección esta vez será virtual, comenzará el próximo lunes 15 y se extenderá durante dos semanas.

Hay 20 plantas de carne vacuna, ocho plantas avícolas y una planta porcina. La unidad de Seara, en Itajaí, será auditada para las exportaciones de carne de ave y porcina. Por lo tanto, la lista que circula entre los empresarios del sector tiene 29 unidades para inspección. JBS lidera la lista con nueve unidades, además de dos de Seara, empresa controlada por el gigante del mercado mundial de la carne.

Minerva tendrá una unidad en Janaúba, Marfrig contará con el Frigorífico Pampeano en Hulha Negra, que pertenece al grupo. También serán fiscalizados los mataderos de las cooperativas Aurora, Languiru y Cotriguaçu. En total, la lista incluye cinco unidades en Mato Grosso, cinco en Paraná, cuatro en Mato Grosso do Sul, tres en Rio Grande do Sul, dos en Minas Gerais, tres en Rondônia, dos en Santa Catarina, una en Acre, dos en Pará y una en Goiás.

En diciembre, técnicos chinos visitaron 18 plantas brasileñas. Tres de ellas estaban habilitadas y sirvieron para revalidar el sistema nacional de salud. Las otras 15 están en la lista de calificación, 11 de las cuales son de carne vacuna y cuatro de ave. El proceso es ágil, lo que aumenta las expectativas de confirmación de nuevas calificaciones en 2024. Se esperan anuncios de plantas calificadas para las celebraciones de los 50 años de relaciones diplomáticas entre Brasil y China a lo largo de este año.

Avance

En total, Brasil tiene 79 mataderos de carne vacuna, porcina y avícola en espera de autorización. Se trata de plantas que presentaron al gobierno brasileño los requisitos necesarios para acceder al mercado chino y fueron incluidas en el sistema de comunicación entre Brasilia y Beijing.

La decisión, a partir de entonces, recae exclusivamente en los chinos. En el sector empresarial brasileño, la perspectiva es que no todas las plantas visitadas sean habilitadas a la vez. Otras opiniones sostienen la posibilidad de una cualificación masiva, incluso de otras unidades capaces de exportar y que no han sido visitadas por asiáticos.