El director departamental del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), Ignacio Ifer, junto a la jefa de oficina, Ana Gabriela Borjas, aclaró “algunas dudas referentes a la implementación de la ley de internación compulsiva”, de reciente aplicación.

Dijo que ha recibido consultas en la oficina del Mides, que dejaron en claro “cierta confusión” en referencia al marco legal.
La modificación a la ley 18.787 de 2011 –coloquialmente conocida como “ley de internación compulsiva”– en sus primeros días de aplicación ha provocado “que algunas personas la confundan con la Ley de Faltas que data del año 2013”.

“La Ley de Faltas tiene un objetivo muy diferente, que es preservar el orden público y los espacios públicos. la de internación compulsiva busca preservar la vida y la integridad física de la persona en situación de calle”, dijo Ifer.
“La reforma lo que hace es justamente agregar unos incisos que permiten que se actúe con aquellas personas con problemas de consumos psicotrópicos, las que al momento de ser contactadas no estén en plena capacidad de discernir. Si su vida corre peligro es posible intervenir, pero –y esto es clave– siempre con una previa certificación médica”.

“Es un avance”, opinó Ifer. “La ley mandata a cuatro organismos, ASSE, Salud Pública, Mides y Ministerio del Interior, a entender sobre el tema. Y si es necesario para la implementación de la norma, se puede recurrir a la Intendencia. Pero ningún organismo puede mirar para el costado, es un instrumento más para ser efectivo”.

Aún cuando se esté en situación de calle, “si la persona no quiere ocupar uno de esos cupos, tiene la libertad de decidir, está amparado en la normativa”.
Pero en el caso de quienes no tengan hogar, “que presentan consumo de sustancias psicoactivas de alto riesgo o descompensaciones de patologías psiquiátricas”, se habilita –como establece la modicación de la ley– “como excepción incluso poder utilizar la fuerza pública” para su internación en el refugio del Mides o en una dependencia de ASSE.

Ifer hizo hincapié en que “debe estar certificado que peligra la vida, que está bajo los efectos psicotrópicos, o se tenga una patología psiquiátrica” para aplicar esta nueva norma.

NO SE HAN REGISTRADO CASOS

En los primeros días de aplicación de la ley de internación compulsiva “no ha sido necesario aplicarla” en Paysandú. “Sí hubo un caso antes de la reforma de la ley 18.787, con peligro de vida para una persona. Fuimos con la policía comunitaria y aplicamos la norma entonces establecida. Actualmente está en un centro de larga estadía y con seguimiento. Pero con esta nueva reglamentación aún no hemos tenido necesidad de aplicarla”.

MUCHAS PERSONAS NO SON DE PAYSANDÚ

En Paysandú hay unas 55 personas en situación de calle. En días de frío intenso, el número aumenta a 62. Por el contrario, en verano, el número se reduce a alrededor de 25 personas.
“La mayoría no son de Paysandú, debe haber unas 12 personas en situación de calle que son originarias de la ciudad. El resto es una población que viene a buscar trabajo o diferentes motivos. Una de las razones que los trae acá es el trato del sanducero, su solidaridad, ellos mismos lo resaltan”.

TRATAMIENTO DE ADICCIONES

Por otra parte, Ignacio Ifer explicó que “podemos derivar desde el refugio a nuestro sistema de chacras, para un tratamiento específico para poder salir de la drogadicción. Antes no se contaba con esto. Hay cupos del Mides para tratar esa patología”.