En 2010, el mundo puso los ojos en Uruguay por nuestro destacado desempeño en el Mundial de Fútbol en Sudáfrica y eso contribuyó a facilitar el trabajo comercial de los exportadores de Uruguay, ya que en visitas a clientes no había que comenzar con las clásicas presentaciones de dónde está Uruguay, etcétera, sino que había que responder preguntas de Luis Suárez y Diego Forlán, lo cual facilitaba la comunicación inicial para lograr futuras ventas.
Hoy, a más de una década, tenemos la oportunidad de volver a brillar a nivel internacional, esta vez liderando una revolución energética desde Paysandú con la producción de hidrógeno verde.
Este proyecto representa una inversión significativa, que no solo impulsa la innovación tecnológica, sino que también fortalece la economía local y nacional, posicionando a Uruguay como referente en energías limpias y sostenibles.

Complementariedad de recursos: una fortaleza local

Paysandú posee una cultura industrial consolidada, que podría colaborar para crear un Nuevo Paysandú Industrial, que aporta experiencia y soporte técnico valioso para la implementación y operación del proyecto. Además, se aprovechará parte de la infraestructura ya instalada en Ancap – ALUR, optimizando recursos existentes.
En cuanto a la generación de energía, el proyecto utilizará nuevas instalaciones solares y eólicas, apoyadas por UTE, cuya matriz eléctrica es en un 97% renovable. El agua del río Uruguay será utilizada en cantidades poco significativas, garantizando un uso sustentable del recurso hídrico.
En materia de transporte, la logística del hidrógeno verde es compleja, pero la región cuenta con vías férreas y acceso fluvial, lo que permitirá un manejo eficiente de la distribución y exportación del producto final.
Además, el proyecto incorpora el uso responsable de carbono: biomasa industrial y forestal proveniente de un radio económico cercano, y la captura de CO2 emitido por chimeneas de ALUR que actualmente se libera a la atmósfera, generando un impacto ambiental positivo.

Impacto económico y social

La inversión trae consigo la creación de empleo directo e indirecto, abarcando desde la construcción de las instalaciones hasta la operación y mantenimiento posterior. Esto representa una oportunidad para fortalecer la economía regional, impulsar sectores conexos y diversificar la matriz productiva.
Socialmente, el proyecto fomenta la generación de capacidades locales y brinda un impulso a la calidad de vida, promoviendo el desarrollo sostenible de la comunidad. La participación activa de diversos colectivos en la discusión del proyecto asegura que se consideren aspectos ambientales y sociales, buscando un equilibrio entre progreso y preservación.

Aspectos ambientales y normativos

El proyecto ha sido optimizado para minimizar su impacto ambiental, reduciendo la superficie industrial y aumentando las áreas dedicadas a la conservación. Aunque se afectarán 33 hectáreas, Uruguay compensa esta área con el crecimiento anual del bosque nativo, cumpliendo con la normativa europea EUDR que exige cero deforestaciones.
Especialistas han confirmado que el uso del agua del río Uruguay se mantendrá en porcentajes mínimos y que el proceso será inodoro, aspectos que contribuyen a la aceptación social y al cumplimiento de estándares internacionales.

Visión de futuro:

Uruguay como líder global en hidrógeno verde
Con acuerdos comerciales que aseguran casi el 100% de la capacidad productiva para la primera etapa, y una ingeniería avanzada en un 90%, este proyecto abre las puertas a un futuro donde Uruguay se posiciona como protagonista en la transición energética global.
Así como en 2010 Uruguay se hizo conocido mundialmente por su desempeño futbolístico en el Mundial de Sudáfrica, ojalá dentro de pocos años recordemos a nuestro país por su aporte decisivo a la producción de hidrógeno verde, generando beneficios económicos, sociales y ambientales para Paysandú y todo Uruguay.
Apoyamos y promovemos iniciativas que, como esta, utilizan los recursos existentes con innovación y sustentabilidad, asegurando que las funciones ecológicas, económicas y sociales se mantengan vigentes para las generaciones presentes y futuras.

Carlos Sarazola
Barbato
Ingeniero Industrial
Director ejecutivo en Forestal Caja Bancaria