Una camioneta nacida en la década del sesenta, más precisamente en 1964. Un producto Toyota creado y lanzado al mercado cuando la marca nipona salía a conquistar mercados en distintas regiones del mundo, luego de asentarse firmemente en su propio país.
Y comenzaron a llegar autos, camionetas y esta versión que constituye un camioncito, que –según referencias no oficiales– debe ser para 1.200 kilos.
Uno de los referentes de este producto se mantiene en excelente estado de conservación y en condiciones de seguir prestando servicios. Esta Toyopet de 1964 pertenece a Carlos Pandule, quien nos manifestaba que la compró en 1983.
Originalmente estaba impulsada por un motor a nafta de 1.900 cc, pero en 1997 le cambió el motor por un impulsor diesel de 4 cilindros de 2.000 cc, con caja de cambios de 5 velocidades.
Desde 1958, Toyota comenzó a hacer camino con sus camionetas y esta Toyopet ayudó precisamente en la expansión de la marca nipona. Ya andando la década del sesenta, el producto fue ganando en calidad y perfeccionamiento.
Nos comentaba Pandule que le hizo varios trabajos de mantenimiento en chapa y pintura; le dio un tono ocre, cuando antes estaba pintada de blanco. También le modificó la caja: construyó una en madera con caños tubulares pintada en marrón. La línea de la camioneta es atractiva, realzada por el tono ocre. Una ancha cabina, con parabrisas enterizo, la parrilla horizontal con dos faros en cada extremo y amplia luneta.
La caja es larga y ancha, las ruedas tienen pequeños guardabarros que se ubican precisamente debajo de la caja. Un marco de hierro con tres varillas en el extremo delantero de la caja, que sirven de protección a la luneta trasera, precisamente. Sin dudas, todo un referente de aquellas Toyopet de los años sesenta, bien presentada tanto en su estética como en su mecánica.
