El curso destinado a las damas para árbitros de fútbol infantil se cerró en la tarde de la víspera con la entrega de los certificados, en una ceremonia desarrollada en el Mercado Municipal, que contó con la participación de autoridades departamentales, de la Secretaría Nacional del Deporte, el Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesional (Inefop) y UTU.
Una veintena de mujeres recibieron tanto sus respectivos diplomas como una libreta y las tarjetas de FIFA para el arbitraje.
Fernando Cáceres, director de la Secretaría Nacional del Deporte, recordó que “desbordaron los cupos” cuando se lanzó la propuesta en Paysandú, que se repitió tanto en Montevideo como en Canelones.
Tras destacar “la valentía” de quienes realizaron el curso, indicó que “el fútbol es parte de nuestra historia y construye la identidad nacional”, pero sobre todo que “es un fenómeno educativo”.
Por eso, indicó a quienes aguardaban por recibir el diploma que “ahora van a tener que velar por un valor casi único: el adversario es tan importante como uno y tenemos que cuidarlo. Y el árbitro tiene la responsabilidad de que eso se respete”, aunque también les recordó que “ustedes tendrán la responsabilidad de educar dentro de la cancha”.
Y cerró: “La mujer es el aspecto fundamental del fútbol uruguayo, y ustedes fueron valientes por haber asumido este desafío que las llevó a que hoy sean la primera generación de árbitras de este país”.
En tanto, Eduardo Pereira, en representación de Inefop, estableció que “esta actividad permitirá que muchas familias generen un ingreso”, y que las egresadas “valoren la certificación, que es de calidad y de la principal institución técnica que tiene el país, como lo es UTU”.
El intendente Guillermo Caraballo, por su parte, se mostró satisfecho al señalar que “esto es la concreción de un proyecto, que es coronado con largos y secretos esfuerzos”.
Tras recordar que “culmina una etapa y comienza otra”, en la que las graduadas ejercerán “una profesión con responsabilidad y que requiere coraje”, pidió un aplauso para todas las mujeres que formaron parte del curso.
“Es algo que no recibirán muy a menudo en esta profesión”, dijo entre risas.
