El exdiputado Gonzalo Mujica, escindido del Frente Amplio, tiene un propósito definido en su actividad política hacia la próxima campaña electoral: trabajar para cambiar de gobierno. En este propósito, tiene además una estrategia planteada, que pasa por reunir en un núcleo básico programático a los referentes de todos los partidos de la oposición. En este camino, el año que viene se propone hacer llegar a todos una plataforma con una serie de temas sobre los que –entiende– es necesario “desafiar al sistema político, decirle ‘acá hay 8 o 10 medidas que son sobre 8 o 10 políticas públicas pesadas, grandes: educación, seguridad, políticas de empleo’, que está vinculado con la rentabilidad de la empresa mediana y pequeña, que es la que más empleo genera”, planteó el exdiputado.
Dentro de estos Mujica otorga prioridad a los temas de seguridad, en los que -sostiene- el gobierno hace agua. “Por ejemplo, hay un sistema creado para atender situaciones de extrema peligrosidad o extrema crisis, que es el PADO. Como es lo único que les dio resultado, ahora lo está tratando de extender a todo el país; vamos a terminar teniendo una policía de dos pisos, la Policía que ya tenemos y arriba de ella el PADO”, describió.
Para el dirigente, lo que hace falta es “poner al ‘microdelito’ –que es el hurto, el arrebato– como eje central del despliegue policial, para poder ir a una política de ‘tolerancia cero al microdelito’, al robo de la bicicleta, que es el que genera la sensación de inseguridad”, afirmó.
Para Mujica, “la gente puede leer un diario porque le llaman la atención los robos a un banco, pero no se siente insegura porque hayan robado el Banco República de Lascano, se siente insegura porque se va a trabajar y se le meten en la casa y le llevan la computadora y la televisión, o la roban en la parada del ómnibus”.
Si todo transcurre como lo tiene planificado el exlegislador, el año que viene se encontrará en una sala del Palacio Legislativo con los dirigentes de tres o cuatro partidos para firmar que estas inquietudes estén incluidas en sus programas, “que van a ser todos distintos, pero van a tener ocho puntos iguales. Es un compromiso ante la ciudadanía de que hay respaldo para esas políticas”.
ENTUSIASMO
Este es el único camino posible, según Mujica, para lograr entusiasmar a un electorado que se desencanta con el Frente Amplio, pero que no cruza la frontera hacia otras propuestas, permanece en el casillero de indecisos. “Para lograr ese cambio de gobierno hay que ofrecerle a la gente algo que le llame la atención, que sea novedoso e interesante. Si se creen que van a ganar por inercia, están locos”, consideró. Las propuestas sobre las que propone un acuerdo amplio son “un elemento que puede ayudar a que el balance del descontento se empiece a volcar, que empiecen a encontrar razones políticas serias del otro lado de la barrera para justificar un salto”, explicó.
Para el dirigente, este cambio de gobierno es una necesidad para el país. “Acá tenemos que pensar en cambiar el gobierno, porque este está trancado y ahora se trancó más, porque el MPP ha tomado un peso tan grande dentro del gobierno que a esta altura el presidente está cercado, no tiene capacidad de movimiento”, dijo.
Un ejemplo de eso, afirmó, fueron los anuncios con respecto a la perforación petrolífera en Paysandú. “Es lo que le va quedando a Tabaré, hacer anuncios de prensa aunque duren 15 días, pero por lo menos lo siguen poniendo, porque si no poco a poco las tapas van cubriendo lo que ‘Pepe’ (Mujica) está pensando que hay que hacer. Es el que corta el balacao el ‘Pepe’. Entonces con un gobierno cercado, trancado, lo que les planteamos a los dirigentes es que vamos a tratar de trabajar para cambiar”.
INTERNA
Mujica evalúa que si bien el Poder Ejecutivo está sin iniciativa ninguna, por el momento no corre riesgo la unidad del Frente Amplio, porque “el tema prioritario es volver a ganar. Están soldados al gobierno, entonces todo lo que suponga un riesgo de volver a ganar lo evitan. Incluso en temas que puedan ser muy importantes para algunos dentro del Frente, pero no dan la batalla hasta el final porque la batalla que realmente les importa a todos es ganar de nuevo”. Como ejemplo de esto, mencionó discusiones “sobre seguridad, sobre educación, sobre un TLC, sobre política exterior en general, sobre ASSE o sobre lo que venga”, que no superan cierto nivel de desacuerdo que ponga en peligro el triunfo en 2019. “La obsesión es cómo hacemos para revertir la situación y llegar bien a 2019; pero no la situación del país: la situación de la intención de voto de la fuerza de gobierno”, señaló.
ACUERDO
Mujica valoró el trabajo que está realizando Edgardo Novick, el líder del Partido de la Gente. “Yo lo trato como un compañero, en el sentido de que es un compañero en la lucha por cambiar de gobierno. Por supuesto, tengo diferencias con él, de distinta índole, en temas concretos. Pero cuando Novick anunció el acuerdo con Giuliani (Rudolph, exalcalde de Nueva York), fui hasta la casa a decirle que me interesa este tema, porque Guiliani implementó una política que no digo que hay que trasladarla mecánicamente, pero donde el tema de ser intolerante con el delito menor, con el delito pequeño, era uno de los ejes de trabajo”. El dirigente no tiene definido dónde estará en la próxima campaña electoral, pero señaló que cualquier acuerdo político será sobre la base de un entendimiento programático. “Si alguien me dice ‘me interesa que ya que hemos logrado esto vos estés presente’, eso lo charlamos. No soy una monjita, vivo de la política, hace 50 años que hago política, así que tampoco me presento como el Robin Hood que llegó”, afirmó. Sin embargo, fue enfático al responder que si no logra el cometido de este entendimiento, “me voy para mi casa”.