Un grupo de treinta trabajadores ocupan el pañol de la empresa Citesa que trabaja para Antel en la instalación de la fibra óptica, ubicada en Silván Fernández entre Bolívar y Ayacucho.
La decisión de la ocupación se adoptó ante “las sucesivas violaciones al convenio por parte de la empresa, pagos fuera de fecha y reducción de personal donde no estaba estipulado que ocurriera. La empresa dio quiebra en agosto y tiene un interventor porque en marzo se reunirá la junta de acreedores”, dijo a EL TELEGRAFO, el dirigente del Sunca, Matías Machuca.
El dirigente informó que se había arribado a un acuerdo tripartito con la empresa, que realizaría una rotación de equipos durante quince días ante la falta de trabajo y el 1º de noviembre se retomaría la totalidad de los trabajadores, “pero la empresa rompió este acuerdo, quiso hacer otro recorte y decidimos comenzar con un paro”, precisó.
A partir de este jueves las medidas de paro se extenderán a la totalidad de las obras que la empresa lleva adelante en otros departamentos e involucra a unos 300 operarios, al tiempo que desde el 1º de noviembre se encuentran paralizadas obras en Artigas, Salto, Paysandú y Treinta y Tres.
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