El Banco de la República Oriental del Uruguay (BROU) decidió que todos los cajeros automáticos que se instalen de ahora en más en sus sucursales, serán del tipo empotrado a la pared, con carga anterior, lo que representará un escollo casi insalvable para que los equipos puedan ser violados utilizando el sistema de explosión con gas, como se ha utilizado ya en 29 ocasiones, aunque ninguna en Paysandú. Las últimas instalaciones de los autómatas, tanto para depositar como para retirar dinero, como las instaladas el martes pasado en la sucursal Tambores y las que se están colocando en la sucursal Paysandú –en el lobby por calle Montevideo– ya no son de carga frontal, lo que representa una mayor seguridad para el efectivo, lo que fue confirmado a EL TELEGRAFO por una fuente de la institución bancaria estatal. Es que al estar colocados detrás de la pared, en caso de querer abrirlos mediante explosión, la brecha se haría hacia la parte trasera del autómata, por lo que no habría acceso a las cajas donde está el dinero y de esta manera se minimizarían los problemas de hurtos. En principio se mantendrían únicamente los autómatas que están dentro de las instituciones bancarias y que tienen acceso solamente en el horario en que el banco está abierto.
El BROU tiene 124 sucursales en todo el país, tres de las cuales están en Paysandú, en las localidades de Guichón, Quebracho y la ciudad de Paysandú, donde además está la microbanca Río de los Pájaros en el edificio de la nueva terminal de ómnibus en bulevar Artigas e Ituzaingó.