Comienza a moverse operativa en el mercado local de lanas

La operativa en el mercado local comienza lentamente a ser un poco mayor que en semanas previas. “Por un lado, algunos productores viendo que los precios de las lanas medias no evolucionan positivamente y se acerca la próxima esquila, están comenzando a vender la lana del año pasado”, explicó a EL TELEGRAFO José Luis Trifoglio.
Por otro lado, “se comienzan a concretar negocios de lanas disponibles finas esquila preparto y algunos lotes de lana en el lomo”, ya que los precios son atractivos para los productores. “En los negocios de lana a cosecharse en los próximos meses, en general se confecciona una tabla de valores según los datos que surjan de los certificados de laboratorio”, dijo el responsable del Departamento de Lanas de Zambrano y Cía.
Más allá de algún negocio puntual de lanas Corriedale en la última semana, con valores que oscilan entre U$ S2,90 para lotes sin acondicionar y hasta U$S 3,40 para los lote grifa verde, hablando de 28 micras, el mercado no registra una corriente fluida de negocios.

EXTERIOR
Culminó esta semana la comercialización de la lana producida en la zafra 2017-2018 en el mercado australiano, que será muy recordada por los productores de lanas finas y superfinas por los muy buenos niveles de precios que se lograron. Esta semana en particular, el mayor volumen ofertado que en las semanas previas, el bajo porcentaje de lanas de muy buena calidad y una demanda, que fue muy selectiva, provocaron una leve corrección a la baja, tanto en moneda local como en dólares americanos. El Indicador de Mercado del Este (IME) bajó 13 centavos de dólares americanos con respecto al cierre de la semana pasada (0,9%) y se ubicó en U$S 15,13 por kilo base limpia. Es decir, 351 centavos por encima del primer remate de la zafra, equivalentes a 30,2%.
Analizando el comportamiento de los precios de los diferentes micronajes, en comparación con el cierre de la semana pasada, “observamos que excepto los vellones de 21 micras que se cotizaron a favor de los vendedores, el resto de las descripciones de lana para peinar que se vendieron cotizaron a la baja”, sostuvo Trifoglio.
Los descensos se ubicaron entre 0,3% (19 y 22 micras) y 2,1% (28 micras). La oferta totalizó 31.800 fardos y la demanda adquirió el 94%. Las primeras ventas de la nueva zafra se realizarán durante el 4 y 5 de julio y se estima que la oferta supere los 43.000 fardos. Este incremento en el volumen a venderse es habitual en la primera semana de ventas de cada zafra, debido a que muchos productores quieren vender en un nuevo año financiero por un tema impositivo.

PROYECCIONES PARA LA ZAFRA
La Oficina Gubernamental Australiana Abares publicó recientemente, en su informe trimestral, un análisis del mercado lanero y dio a conocer sus proyecciones para la próxima zafra, que ya está comenzando. En ese sentido, afirmó que IME para la zafra 2018-2019 aumentará un 15,5% en dólares australianos.
Cruzando esa información con los pronósticos de la relación cambiaria con la divisa estadounidense, realizado por la misma institución, se estima que el IME (en términos de la divisa estadounidense) se incrementará 14% en relación con promedio de la zafra 2017-2018. El incremento del IME refleja principalmente una fuerte demanda de lana de 19,5 micras y más finas, y un lento crecimiento de la oferta, que ejerce una mayor presión al alza sobre los precios.
La tendencia hacia el cruzamiento que se ha registrado en la última década con razas carniceras ha incrementado la proporción de lanas más gruesas en términos absolutos, incrementando su participación porcentual en el perfil de la producción de lana australiana. La lana fina es un producto de nicho, en el mercado global de fibras, y representa alrededor del 1% del consumo textil mundial de los últimos cinco años. La demanda de los procesadores por lanas finas está impulsada, a su vez, por la demanda de los consumidores de textiles de pura lana y prendas de alta calidad.
Además, se espera que el crecimiento de los ingresos previsto en los principales mercados consumidores de textiles, como China, Estados Unidos y la Unión Europea, respalde la demanda global de lana fina y superfina a corto plazo. Sin embargo, la lana es cada vez menos competitiva en precio, en comparación con las fibras alternativas. Durante el período mayo 2017 y abril 2018, el precio de la lana de 21 micras, en dólares americanos, aumentó en un 16% frente al precio del algodón y 21% ante el poliéster. De mantenerse esta situación, podría provocar que algunos fabricantes comiencen a sustituir cierto porcentaje de lana por otras fibras más económicas, lo que podría ejercer cierta presión a la baja sobre los precios de la lana australiana hacia la segunda mitad de la zafra 2018-2019.