La Dirección Nacional de Energía del Ministerio de Industria, Energía y Minería, publica anualmente el Balance Energético Nacional (BEN). Este compilado de estadísticas es una herramienta de suma importancia a la hora de conocer y entender la realidad energética del país. Con series que llegan hasta 1965, el BEN elaborado en Uruguay es el más longevo en América Latina y el Caribe, según afirma en su último boletín la firma especializada SEG Ingeniería.
Afirman que la última edición de este estudio, con datos del año 2017, presenta varios apuntes relevantes. La biomasa alcanzó el 43% en la matriz de abastecimiento de energía, lo que la convierte por segundo año consecutivo en la fuente de mayor participación, desplazando al petróleo y sus derivados, fuente típicamente principal en esta matriz.
El 98% fue generación renovable
Otro apunte interesante es el de la generación renovable de electricidad. Por quinto año consecutivo la generación de electricidad creció al igual que lo hizo la generación renovable de esta energía.
En 2017 la generación eléctrica creció 3,4%, al tiempo que la renovable lo hizo 5,2% y representó el 98% de la generación eléctrica total. Sin embargo, a pesar del crecimiento en la oferta de electricidad, la demanda interna de la misma en 2017 cayó 2,2%, mientras que la exportación de electricidad ascendió a 126 ktep (1,5 TWh), lo que implicó un incremento en la exportación del 88%. Por otro lado, por primera vez desde su introducción en 2014, la generación de electricidad a partir de energía solar fotovoltaica superó a la que se realiza a partir de combustibles fósiles y representó el 1,9% de la matriz.
Cambiando la mirada a una perspectiva desde la demanda de energía, surge que por décimo año consecutivo la industria es el mayor demandante de energía del Uruguay. Mirando la serie desde su comienzo se distinguen tres etapas; desde 1965 hasta 1993 la demanda fue dominada por el sector residencial, en una segunda etapa, entre 1994 y 2007, fue el transporte el sector de mayor consumo energético y desde 2008 es el sector industrial el que acapara más demanda.
Según el BEN la industria consumió 1.988 ktep (miles de toneladas equivalentes de petróleo), el 43% de la energía total en 2017, consumo 218% mayor a los 626 ktep del año 2007, dejando a las claras el impacto que tuvo el ingreso de las dos grandes plantas de celulosa en el país.
Aumentos de electricidad en enero
El informe de enero 2019 de SEG Ingeniería, establece que en este primer mes se registraron aumentos en todos los precios de los energéticos a excepción de los combustibles. El 1º de enero, el supergás aumentó 7,8% y llegó a los 46,9 pesos por kilogramo, siendo su valor anterior 43,5 $/kg. En segundo lugar, el precio de la electricidad subió 5,7% en enero (por debajo del aumento anual de 2017 del IPC de 7,96%) con excepción para las tarifas de Mipymes, a las cuales se les otorgó un descuento especial del 20%. Por último, variaron el gas natural y la leña, energéticos cuyos precios suelen variar mensualmente. El gas natural, luego de un bimestre de cierre de 2017 a la baja, crece 1,4% en el mes. La leña, valorada según datos del Instituto Nacional de Estadística, aumentó 0,5% en enero.
Dados estos movimientos en los precios, ambos índices de precios de la energía, elaborados por SEG Ingeniería, crecen en el mes de manera considerable, sin embargo, el aumento es de mayor dimensión para el sector residencial. El costo energético para la industria, reflejado por la evolución del IPEI, varió en enero un 3,41%, llegando a una variación en el año móvil de 5,86%. Valorado en el IPER, el costo energético residencial registró una variación en el período que va desde enero de 2018 de 7,21%.
Precios del mw/h en el mercosur
El informe establece que Uruguay sigue siendo el país con la energía eléctrica residencial más cara del Mercosur, con U$S 274 por Mw/h, seguido por Brasil con U$S 208por Mw/h, Chile con 181, Argentina con U$S 99 y Paraguay con 68 dólares por megawatt/hora.
En cuanto al costo de la energía eléctrica para las industrias, Uruguay está segundo tras Brasil, que la cobra a razón de U$S 128 por Mw/h, nuestro país lo vende a un dólar menos, U$S 127, Chile a U$S 118 por Mw/h, Argentina a U$S 83 y Paraguay a 63 dólares por Megawatt/hora.
La generación según la matriz
La Administración del Mercado Eléctrico, que centraliza toda la energía eléctrica que se produce en el país y la dirige hacia donde hay mayor demanda, tiene en su último informe el detalle de las fuentes de producción de energía eléctrica, la cantidad producida y su porcentaje en el total. También el volumen de energía, medido en Megawatts/hora que se exporta hacia los países vecinos.
Mientras tanto, los técnicos de ADME establecen su planificación de producción futura, y al respecto señalan que para la semana que comienza “los modelos no prevén prácticamente precipitaciones para ninguna de las cuencas. Los aportes previstos por CTM (en la represa de Salto Grande) son del orden de 2600 m3/s sin lluvia y de 2900 m3/s con lluvia”.
“La energía eólica se estima aproximadamente en 75 GWh y la demanda en 220 GWh. Brasil aceptó la oferta de exportación y se calcula una potencia media de intercambio de 70 MW. Se espera seguir exportando energía hacia Argentina” y afirman en cuanto a las represas que “Bonete a pleno; Palmar hasta pleno; Salto cierra la demanda; Térmico de ser necesario por picos de potencia”.
También establecen los costos de producción de la energía eléctrica, que es variable según la fuente generadora, y va desde los 69,4 dólares el Megawatt/hora hasta un pico de 179,3 dólares el Mw/h.
