La asamblea de funcionarios de UTU que se realizó ayer en el local de la Escuela Técnica resolvió levantar las medidas de ocupación de los centros de estudio, una vez que recibieron el informe sobre la reunión de la comisión bipartita integrada por el sindicato y el Consejo de CETP-UTU en Montevideo aceptando las propuestas sindicales de mayor seguridad, un equipo que trate a los menores por las potenciales situaciones de violencia y que se destine otro local para los alumnos de bachillerato de la Escuela Técnica.
Así lo confirmó a EL TELEGRAFO el delegado sindical José Caeiro, quien dijo que “eso fue lo que el Consejo se comprometió a proporcionar”, y destacó que “el nuevo local de UTU en Paylana, que estaba previsto para el nivel III o terciario, será también para el nivel II de bachillerato, porque nos falta espacio. Eso será a mediano plazo, cuando construyan esa UTU”.
Dijo que “levantamos la ocupación de la Escuela Técnica, la entregamos a las 12 de la noche y vamos a esperar hasta el jueves que viene (11 de abril) donde vamos a evaluar si las medidas del Consejo se van cumpliendo, tanto la portería como del equipo multidisciplinario”.
Las agresiones en la UTU
Consultado sobre qué tipo de agresiones y violencia se constataron en los centros de estudio y determinaron estas medidas, Caeiro dijo que “es bastante continuo, no solamente entre alumnos sino de alumnos hacia docentes, y tenemos algunos casos de padres a docentes o a la dirección. Son las menos -reconoció- pero vemos que eso va en aumento”, y comentó que “la semana pasada tuvimos una situación donde ingresó una persona ajena a la institución ante un problema que tuvo su hija con otra alumna. Y también hay problemas de grupos, porque acá vienen alumnos de todos lados, y a veces hay problemas que se originan en los barrios y se trasladan acá adentro, a las clases y a los grupos. Y otro tipo de problemas es que a veces llamamos a los padres y hubo una madre que acá mismo aconsejaba a la hija tomar represalias con los que tenía problemas, cosa que no cabe en lo más mínimo”.
Los casos de violencia
Relató que “hubo una adscripta (de la Escuela Agraria) que resultó herida con un par de costillas fisuradas y otra funcionaria con la muñeca lesionada por una pelea acá en la Escuela Técnica. Y también hay que ver que acá hacerse de una herramienta que se puede usar como arma es muy sencillo porque hay talleres y mucho hierro y ya se han sacado a los alumnos puntas, cortes y ese tipo de cosas, y por suerte no ha pasado a mayores”.
Aclaró que “no creemos que eso se termine con un portero, pero acá pasan cosas como el ingreso de gente que ni siquiera sabemos quien es, y hemos sacado gente del patio que no pertenece a la UTU y no sabemos que están haciendo, y una portería es de gran ayuda para controlar un poco más, que sea un filtro. Porque nos falta gente, y muchas veces los que hacemos portería somos los docentes o los funcionarios adscriptos, que hacen esa tarea, pero no es su función y están descuidando lo que tienen que hacer”.
El equipo multidisciplinario, dijo, “es para trabajar con aquellos chiquilines que presentan problemas de conducta, tratados por siquiatra, psicólogos, trabajar junto al INAU y el Mides”.
También destacó que “en la reunión que organizamos con padres, alumnos y profesores vino mucha gente, nos apoyaron muchísimo, y tanto padres como alumnos expresaron lo que pensaban no solamente del paro que afectaba a un montón de chiquilines y también a los padres y docentes, pero vinieron a darnos su apoyo”.
