La Regata Meseta – Paysandú, más sanducera que nunca

Año a año, la Regata Meseta de Artigas – Paysandú escribe una nueva página en el libro de oro de la competencia náutica más importante del Uruguay.
Y son pocas las actividades que pueden superarse año a año a sí mismas como sucede con este clásico del Yacht Club Paysandú, que este año mostró incluso a los visitantes una remozada versión de la competencia, así como también de sus instalaciones.
Aquellos viejos navegantes que sembraron la semilla del éxito hace 70 años nunca imaginaron que ese libro seguiría sumando sumando más y más páginas pese al paso de las décadas.
Y esta nueva edición engrosó ese rico historial de la mejor manera. Por la participación, por la camaradería y porque en definitiva los dos premios mayores se quedaron en casa.
Teco resultó ser el ganador de la regata, mientras que Morocha fue el velero que tuvo mejor desempeño en el agua, y se quedó con la cinta azul.
El resumen deportivo incluirá como futuro antecedente cuáles fueron los dos grandes protagonistas, pero quizá no indique que las dos etapas debieron acortarse por la falta de viento, algo normal si se quiere dentro de esta regata por las lógicas condiciones climáticas en esta época.
Un marco de público importante despidió a la flota en la Meseta de Artigas, desde donde se trasladó río abajo en procura de llegar a arroyo Malo, el punto de neutralización.
Pero no hubo caso: se debió acortar el recorrido. Las autoridades determinaron que la línea de llegada estaría finalmente un par de millas río abajo de la desembocadura del arroyo Guaviyú.
La segunda etapa resultó igual de complicada. Sin viento, se optó por dejar arroyo Malo para navegar río abajo procurando que el viento finalmente apareciera.
Y una vez que comenzó a soplar, la flota inició la segunda etapa de la regata, cuando se pasaba la punta norte de la isla Pepeají.
Y nadie se dio tregua. Todo resultó parejo, sabiendo que nadie podía cometer errores en procura de estar lo más arriba posible.
El último tramo fue peleadísimo entre Morocha, Zig Zag y el Top Line, que buscaron quedarse con la etapa. Y fue finalmente el Morocha el que cruzó primero la línea de meta, y más tarde conocería que sería el ganador de la cinta azul.
Hubo que esperar por la definición en tiempo corregido para conocer, en medio de gran expectativa, cuál sería el ganador de la regata. Y fue Teco, otro representante local, el que terminó festejando la obtención del título, para inscribir su nombre en el largo historial de la competencia.
Pasó la regata y volvió a hacer historia. Ya son 70 versiones ininterrumpidas y, quedó claro, cada vez es mejor.