Jorge Larrañaga votó “con esperanza” porque “siempre es posible clavar una pica en Flandes”

“¿Quién tiene dos sobrinas más lindas?” dijo Jorge Larrañaga abrazado a dos hijas de su hermana Andrea, fallecida en 2004. Y caminó abrazado a ellas por Silván Fernández los metros que lo separaban del liceo 5, donde usualmente vota, en la serie KAA. En la puerta, ante unas dos docenas de micrófonos, grabadores y celulares, con una sonrisa, dijo: “Siempre hemos luchado; siempre es posible clavar una pica en Flandes”.
La frase fue en obvia alusión a que en las últimas horas previas a las primarias se consideraba que estaba en tercer lugar en las preferencias de los votantes del Partido Nacional, detrás de Luis Lacalle Pou y de Juan Sartori por la candidatura a la Presidencia de la República.
Se denominaba pica a una lanza larga, con asta de hierro pequeño y agudo en el extremo superior, característica de la infantería española de los siglos XVI y XVII. Los Tercios españoles –primer ejército moderno europeo– tenían muchas dificultades para llevar soldados a Flandes (la guerra de los ochenta años). De ahí la dificultad de poner una pica en Flandes. De ahí la rebeldía de Larrañaga y la reafirmación de su fortaleza.
“Con esa esperanza vengo a votar. He tenido una larga lucha toda la vida y la he desplegado con honor, dignidad y sacrificio. Aquí estoy en esta Heroica que tanto quiero, que es mi pago, donde están mis sentimientos. Haciendo lo que tengo que hacer, contribuir con la mejor democracia porque hemos intentado llevar adelante siempre la mejor política”, dijo.
Obviamente, el gran tema no fue su voto en las primarias, sino en realidad el cruce con el presidente Tabaré Vázquez en torno al uso de la cadena nacional de radio y televisión, que solicitó para exponer sobre su proyecto de reforma de la Constitución para dar mayor seguridad pública.
Vázquez “no puede faltar el respeto. No a mí, no a Jorge Larrañaga que no importa nada. De última soy alguien que va a pasar. Importan las más de 400.000 personas que firmaron. Y las que no firmaron. Porque la cadena no le pertenece al señor Presidente ni le pertenece a Presidencia de la República. Le pertenece a todos los uruguayos”, aseguró Larrañaga.
Subrayó que el Presidente “firmó una carta. ¿Ahora desconoce que la firmó? Dirigida a Silvia Ferreira diciendo que se otorga la cadena para el día siguiente de la elección interna. Si no me afectó el aire de la madrugada es mañana 1º de Julio. Tenemos la carta firmada por el Presidente, recibida con sobre de Presidencia”.
Además “me llamó el prosecretario de la Presidencia (Juan Andrés Roballo) y me dijo claramente que tenía que ser (hoy) lunes. A lo sumo él podía gestionar dos o tres días más”, a lo que “le dije que es inadmisible porque el antecedente del anterior plebiscito (baja de la edad de imputabilidad para delitos graves) el entonces presidente Mujica otorgó –de común acuerdo con los que estaban en una posición y en otra– la cadena unos pocos días antes de la elección de octubre de 2014. Hasta sortearon quién aparecía primero y quien después. Hay que andar con la verdad y no utilizar el poder de la forma que se utiliza. Es una reacción antidemocrática”.
Ahora que el Presidente indicó que no había expresado lo que Larrañaga entendió este dijo que “se desdijo; cambió de posición. No hay ningún problema, pero esta semana no vamos a utilizar la cadena nacional en las condiciones que se pretendía”.
Tras sortear los micrófonos y las preguntas, no fue sencillo llegar a su circuito, aunque en él no había ningún ciudadano esperando votar. Muchos abrazos, muchos saludos, incluyendo uno al “milico Morales, jugábamos al fútbol”. Finalmente a las 11.16 salió del cuarto secreto y se aprestó a introducir su sobre en la urna. Un minuto más al menos. Porque posó para los fotógrafos ubicados en diferentes ángulos. Todos tuvieron su foto. Después sí, de nuevo abrazos, besos y saludos.
Se lo veía feliz. Con esperanzas. Porque aunque sea costoso mantener la batalla en Flandes, siempre se puede poner una pica en el centro de la lucha. La que no abandona.