Funcionario del Poder Judicial de Mercedes fue formalizado por abuso sexual a menor

En la sede judicial de Soriano se resolvió formalizar al funcionario por un delito de abuso sexual especialmente agravado.

La Justicia de Soriano dispuso formalizar a un funcionario del Poder Judicial tras haberse comprobado su presunta responsabilidad en un caso de abuso sexual cometido en perjuicio de un joven de 15 años. El hecho habría ocurrido en 2018. En ese entonces, operadores del sistema judicial de Soriano y Río Negro se excusaron de intervenir. Por lo que, lo que luego de pericias sicológicas practicadas en Montevideo y el relevamiento ocular en carpeta fotográfica de policía científica, se resolvió la prohibición de acercamiento a la víctima por el término de 120 días.
El profesional, de 55 años, es públicamente conocido en el departamento señalado, por lo que el caso ha tomado cierta visibilidad; aunque durante varios meses estuvo en el olvido. De acuerdo a lo publicado por colegas de InfoRío, se desempeña laboralmente en Defensoría de Oficio, enseña en distintas instituciones educativas y está vinculado a la comunidad católica. Además, está casado con una jueza. En tanto, este jueves la Suprema Corte de Justicia resolvió iniciarle un sumario administrativo con separación del cargo y retención del 50% del salario.

ADOLESCENTE DE 15 AÑOS
Fiscalía de la Nación expuso que la fiscal Stella Alciaturi pidió medidas cautelares no privativas de libertad, mientras dure el proceso de investigación.
De acuerdo al expediente iniciado se dio a conocer cómo habrían sucedido los hechos. “El adolescente caminaba a paso ligero en dirección a la casa de una amiga, con la que pensaba concurrir a un ensayo primero y posteriormente a una estudiantina. Iba corriendo para no llegar tarde y al llegar a una intersección, se detuvo porque se sentía cansado. En ese momento llega al lugar en su automóvil el señor R.M., a quien la víctima conocía por ser profesor. Según relata la víctima, le pregunta a dónde va y se ofrece a llevarlo. La víctima accede y se sienta a su lado en el automóvil. A continuación le manifiesta que antes de llevarlo a la casa de su amiga debía pasar un momento por su domicilio a recoger algo. Es así que se dirige a su domicilio. Al llegar al lugar lo invita a pasar y le indica que se dirija a la parte superior del inmueble, donde tenía el imputado elementos inherentes a su labor profesional. La víctima manifiesta que R.M. coloca la silla obstruyendo la puerta de entrada, se sitúa a su lado, lo toma de la cintura y le propone mantener prácticas sexuales. Manifiesta haberle dicho que no, pero que igual M. lo abusa sexualmente. Luego ambos salen y la víctima se retira hacia la casa de su amiga, a la que devela lo ocurrido anteriormente. Las testigos manifiestan que llegó agitado, angustiado. Posteriormente la madre de una de sus amigas al tener noticia del hecho, lo acompañó para que develara la situación a su hermana mayor, quien efectúa la denuncia”.
Por su parte, horas más tarde, el adolescente recibió mensajes vía celular de su abusador. Le preguntaba cómo había estado la estudiantina. Como el joven no respondió, le preguntó “¿Estamos mudos?”.
Contando con la denuncia, la declaración de los testigos, la inspección en la finca del hombre –documentada por Policía Científica–; capturas relevadas desde el número de WhatsApp de la víctima en que se hallan los mensajes del denunciado; la pericia sicológica de la víctima; y los informes de médico forense, se solicitó la formalización del funcionario ya que los hechos “encartan, según considera esta Fiscalía en la figura del delito de abuso sexual especialmente agravado”. Asimismo, el texto explica que no se pidió prisión cautelar “ya que el imputado es primario absoluto, y ha respetado durante varios meses las medidas cautelares impuestas por la Sede de familia. Incluso manifestó que, aunque no había sufrido sanciones administrativas en el centro de estudios, ya que recién se formalizó ayer, de todas formas optó por no elegir horas para evitar el encuentro con la víctima”.