Sr. Director.
Escribo en relación al artículo acerca de la empresa Charles Chalkling publicado el día domingo 25 de agosto del corriente en su prestigioso diario.
Mi primer pensamiento sería decir: “Qué bueno, que consigan nuevos mercados”. Pero pensando mejor, me da lástima por Paraguay. Hace sólo unos días se vio en la prensa que ya hubo un muerto y varios operarios afectados por fumigaciones de productos químicos en cultivos agrícolas. Hace ya un tiempo que productores uruguayos están haciendo inversiones en Paraguay. ¿Precio de las tierras? ¿De la mano de obra? ¿Presión tributaria como ahí lo expresa? ¿Menos controles? No lo sé. Tal vez una combinación de todo eso. No creo que invertir en Paraguay sea con la finalidad de ayudar al pueblo y/o a los indígenas paraguayos.
Me detengo en la opinión de Chalkling, la que transcribo textual: “la defensa de la ecología (en nuestro país) es un discurso porque no hay educación respecto al debido tratamiento de los cultivos”. Y define esto como “mala praxis”. Creo que es una visión equivocada sobre los Ingenieros Agrónomos y sobre lo que se enseña en la Udelar al respecto. Las buenas prácticas son muy bien enseñadas. Excepto a pilotar aviones fumigadores, se nos enseña todo. Nos enseñan sobre qué productos utilizar en cada momento de los diversos cultivos, con qué herramientas, cuáles picos usar en los mosquitos fumigadores, con qué altura de aplicación y con qué velocidad dependiendo de las condiciones del clima y del sitio en el que se aplique. Hay incluso varias publicaciones del MGAP al respecto. Con algunos de esos boletines informativos se instruye a los operarios de las empresas fumigadoras.
Aun así, estas empresas producen daños en predios linderos a aquellos en los que tienen sus cultivos. ¿Por qué? Ellos conocen muy bien las normas y tienen también el conocimiento de cómo hacerlo bien. Y de cuáles son los mejores productos, ya que Chalkling se lamenta de que nuestro Ministerio sólo se preocupa de analizar el principio activo. ¿Son sólo los excipientes los que ocasionan daños en el medio ambiente y en los predios vecinos y en la salud de la gente? Y si así fuera (que no lo es) y saben que hay productos mejores que otros y hay en ellos una genuina preocupación por el medio ambiente, ¿por qué no se deciden por lo que es mejor?
El técnico detrás de cada proyecto agrícola, ¿no debería estar presente en cada fumigación? Simplemente supongo que a veces la operativa interna de las empresas fumigadoras se decide sin revisar si el momento es el adecuado. Y por supuesto, no se controla el ancho operativo ni la velocidad a la que se realizan las aplicaciones ni las características de cada sitio. La presencia del técnico en cada fumigación y su firma avalando la operativa daría garantías a esas prácticas. En forma similar a la presencia exigida de un veterinario para varias tareas con el ganado.
Como vecina de esta empresa, hace años que sufrimos las consecuencias de sus malas prácticas. El desprestigio que tienen en el Uruguay, no es como afirma Chalkling “por causas que no nos son propias”. Es claramente porque sus operativas son incorrectas. Si bien frente a un daño, el MGAP concurre y constata y verifica hoy en día mediante toma de muestras y análisis (de lo que tengo pruebas) y atribuye claramente la responsabilidad de la empresa fumigadora en los daños en el predio de mi propiedad, no se han observado hasta el momento cambios significativos al respecto. También es cierto que hay normas en el país que son diversas (MGAP, Intendencia Municipal) y ahí los vericuetos legales hacen que se logre zafar, de una manera o de otra.
Pero así estamos y seguiremos tratando de que las buenas prácticas, que son muy bien incorporadas en los técnicos de la Udelar, sean también incorporadas por las empresas fumigadoras. Tal vez tendrán años en Paraguay antes de que allá se llegue a tener controles como los que hay en nuestro país. Me nace decirles: que los disfruten. Aunque internamente me da pena por los que tendrán que sufrir las consecuencias.
Clara Isabel Ana Terzaghi De León, ingeniera agrónomaegresada de la Udelar