Al ser consultado por EL TELEGRAFO el director general de Servicios Federico Álvarez Petraglia aseguró que “la supuesta pericia no cambia nada las primarias conclusiones que dimos a conocer a la población de Paysandú, seguimos manteniendo que lo que existió es un acto de sabotaje, con la única variante, tal vez porque eso lo deberá establecer la Justicia, de que en lugar de haber sido una acción intencional lo que existió en todo caso fue una omisión intencional”.
Enseguida dijo que “no me cierra por ningún lado, siempre y cuando los funcionarios estén cumpliendo con su deber y no hubieran mentido en forma descarada. La afirmación de la supuesta pericia tiene que ser contrastada con estas declaraciones a efectos de determinar qué fue lo que paso”.
“No encuentro fundamento para aseverar que el hecho se deba a la falta de mantenimiento o control de rutina”, dijo Álvarez Petraglia ante el dictamen del perito. “Estimo que el funcionario cuando dice que las tuercas de sujeción trabajaron flojas en sus espárragos por un período de tiempo extenso en horas y kilómetros, sin especificar cuántas horas o kilómetros, tal vez ignore que este tipo de vehículos trabajan hasta doce horas por día y recorren más de 100 kilómetros, extremo al que debe sumarle el volumen de residuos que transportan que no baja de los 3.000 kilos más o menos”.
“La única consecuencia eventual que podría aparejar este informe es acotar el núcleo de posibles autores, ciñéndolo a aquellos que estaban en un contacto directo con el vehículo y al grupo de operarios encargados de los controles de rigor”.
De acuerdo a la Investigación de Urgencia ordenada por el intendente Guillermo Caraballo “los mecánicos del Departamento afirmaron en sus declaraciones haber cumplido con todos los deberes a su cargo, entre ellos el ajuste de las tuercas de todos los camiones de la recolección desde el viernes anterior al suceso (fue el lunes siguiente); es más, por escrito un mecánico dijo que el domingo él personalmente ajustó las tuercas de ese camión”.
Aseguró Álvarez Petraglia que “la Intendencia irá hasta las últimas consecuencias en busca de los responsables, ya que aquí se pusieron en riesgo no sólo bienes municipales, sino la vida de funcionarios y ciudadanos, hechos a nuestro entender intolerables que merecen la más enérgica censura y las máximas sanciones administrativas y penales”.
Subrayó que cuando la Intendencia dio a conocer lo ocurrido y la decisión de investigar rápidamente “no atribuyó responsabilidad a nadie en particular, se comunicaron hechos y se dio un contexto político en el cual algunos ediles nacionalistas habían montado una campaña de terror hacia este Departamento. Llamativamente vimos que las mismas edilas que luego se sintieron ofendidas, antes que yo mismo se habían enterado del hecho y estaban presentes en el lugar, junto al camión siniestrado. Que decir eso implique imputar responsabilidad en el hecho a un partido político es una conclusión que la deben explicar aquellos que la sacaron, dicho sea de paso, por algo se hicieron cargo ellos solos, pero eso será un tema que deberán charlar con su terapeuta, obviamente a mí me excede, apenas soy abogado”.
“Fueron hechos objetivos de acuerdo a los datos técnicos que en ese momento teníamos, datos que la pericia termina por confirmar: hubo manipulación por acción u omisión de las tuercas del camión”.
