Asignaron custodia policial a liceo 5 desde medianoche hasta el amanecer

Desazón. Impotencia. Rabia. Se palpaban en el aire en la reunión realizada en el liceo 5 después que desconocidos pero cuyo modus operandi abona la idea que son alumnos o exalumnos, cometieron doce robos durante los cuales provocaron graves destrozos. De hecho, en el último, que quedó en un intento ante la presencia de un guardia de seguridad, se descubrió que se trata de dos menores de edad. Muy probablemente instruidos en el liceo 5, pero sin raigambre ni con el centro educativo ni con la ciudad en que viven a la cual debería proteger, especialmente al lugar donde tantas veces en sus aulas compartieron la adquisición de conocimientos.
En uno de los hurtos vandalizaron el laboratorio de Físico-Química jugándose la vida, pues pudieron perderla si tomaban contacto con ácidos concentrados o diluidos que con fines educativos allí están, según relató una de sus responsables, Verónica Quintana.
La reunión fue conducida por la directora Adriana Tejeda y el subdirector Ruben Bortagaray y participaron el diputado Nicolás Olivera, el diputado electo Juan Carlos Moreno, los dirigentes colorados y Miguel Baccaro y Laura Baccino, el comisario Juan Custodio en representación de la Jefatura de Policía, integrantes de la comunidad educativa, padres y vecinos.

MÁS DE 100.000 PESOS

Los hurtos y actos vandálicos fueron realizados aprovechando el receso de enero y se han extendido hasta la noche del domingo pasado. Si bien el Consejo de Educación Secundaria el 5 de diciembre del año pasado había autorizado la contratación del servicio de vigilancia 222 para una serie de locales, incluyendo los liceos 1, 2, 3, 4, 5 y 6, siendo el 5 el único habilitado a contratar el servicio durante las 24 horas, no fue posible que se instalara.
En una reunión mantenida en la víspera por la dirección del liceo 5 y el jefe de Policía, comisario general (r) Luis Mendoza quedó en evidencia que la Policía no puede acceder a esa demanda en la medida que no cuenta con los efectivos suficientes para un servicio de carácter voluntario que no puede exceder por agente las 50 horas mensuales.
Pero, “la buena noticia” dijo Tejeda es que el Jefe de Policía “ha determinado que todas las noches entre las 0 y 6 horas haya dos efectivos policiales en el interior del liceo, custodiando el lugar y por supuesto con comunicación para solicitar refuerzos cuando sea necesario en caso que se repitan estos hechos lamentables”.
Durante el día trabaja ya, en sus respectivos turnos, el personal del liceo 5, por lo que estará las 24 horas con personal –de Secundaria o de la Policía– en las instalaciones.
Aún no es posible “una evaluación total de lo hurtado y destrozado pero sin dudas supera los 100.000 pesos y tememos que la cifra final sea bastante más elevada”, agregó la directora.
Uno de los sucesos más dramáticos fue el mencionado en el laboratorio de Físico-Química, “donde provocaron enormes destrozos y solamente pudieron llevarse cuatro ventiladores y una garrafa chica”, salvando sus vidas de milagro al no tomar contacto con los ácidos almacenados. “Bueno, si les pasaba a ellos no era grave”, expresó un asistente a la reunión evidenciando el hartazgo ante la sucesión de hurtos y robos que se vive en la zona destripta como “tierra de nadie”. “Antes esto pasaba en la escuela 1, ahora están subiendo”, agregó otro padre.
La directora Tejeda explicó que “a toda hora fueron los hurtos en enero, de tarde, tardecita, noche” y subrayó que “por la forma de operar pensamos que pueden ser alumnos o exalumnos porque conocen absolutamente todos los espacios y eligen para robar aquello que sea de fácil venta”.
El liceo 5 “es de contexto, por lo que aquí damos alimentación en el comedor liceal y tenemos una sala maternal para que aquellas jóvenes con hijos puedan igualmente seguir estudiando, atendiendo a sus niños allí. No quedó un tenedor en la cocina”, dijo el subdirector Ruben Bortagaray.

LISTA DE LO HURTADO Y VANDALIZADO

La lista de lo hurtado se publica con especial énfasis en prevención, de modo que si se aprecia la venta de, por ejemplo, útiles de orientación pedagógica, se dé parte a la Policía para que proceda a la investigación. Como expresó una vecina con indignación “¡no es nada fácil vender 15 ventiladores! ¡Alguien los tiene que ver!”
Los útiles hurtados –que son esenciales en el inicio de clase para estudiantes de contexto crítico– son los siguientes: 516 lápices hb; 200 sacapuntas; 21 compases; 135 gomas; 24 Cascola (marca comercial); 500 hojas de garbanzo blancas; 5 paquetes de goma Eva; 248 cuadernos de 36 hojas; 70 cuadernos de 48 hojas; 25 cuadernolas cuadriculadas; 70 cuadernolas de 60 hojas; 32 cajas de 12 lápices de colores; 2 cajas de 48 lápices de colores; 25 cartulinas blancas; 25 cartulinas de colores; 7 juegos de geometría medianos y otros tantos de 30 centímetros.
Mobiliario y equipos: 17 ventiladores, 15 oscilantes de pared y 2 de pie.
Equipo didáctico: 2 televisores smart de 32”, 1 amplificador activo, grande; 1 consola de 8 canales; 1 caja parlante pasiva con woofer de 12”; 3 micrófonos Shure con cables y pies; 1 auricular de DJ con micrófono; 2 equipos de música grandes; 3 reproductores de música modelo “huevo”; 1 proyector; 1 laptop Toshiba año 2017 aprox. (con datos sensibles); 3 guitarras españolas; 5 alargues de 30 metros con zapatillas; 5 termómetros digitales.
Equipamiento de limpieza: 1 desmalezadora, 1 hidrolavadora y varias herramientas de mano.
Varios: 1 garrafa supergas de 13 kilos; 1 garrafa de supergas de 3 kilos; 40 juegos de cubiertos, útiles de oficina (sobres, bolígrafos, resaltadores, cinteros); 10 paquetes de hojas A4; termos y mates; 2 jarras eléctricas; caños de cobre de los equipos de aire acondicionado; equipamiento para bebés de la Sala de Lactancia.
Asimismo quedaron inutilizados tras ser vandalizados 5 armarios metálicos grandes, dos puertas; 4 armarios metálicos medianos tipo bajoventana; 3 armarios de madera tipo MDF o aglomerado de dos puertas; 2 archivadores para carpetas y legajos de cuatro cajones; 2 sillas giratorias de oficina.