El gobierno carga “con un compromiso electoral que es un contrato con los orientales”, dijo Lacalle Pou

El senador José Mujica le tomó el compromiso de honor y la Declaración de Fidelidad Constitucional al presidente Luis Lacalle Pou y la vicepresidenta Beatriz Argimón.

En el Palacio Legislativo, en cuyos alrededores se volcaron personas de todo el país, se realizó la Sesión Solemne durante la cual Luis Lacalle Pou y Beatriz Argimón quedaron instituidos como presidente y vicepresidente de Uruguay.
Desde media mañana, quienes esperaban ansiosos por ver al nuevo gobernante fueron eligiendo sus ubicaciones a lo largo de avenida Libertador, desde el Palacio Legislativo hasta 18 de Julio y luego por ésta hacia la plaza Independencia. Portando banderas, en su mayoría el pabellón nacional, así como divisas partidarias, soportaron la alta temperatura para permanecer estoicos y deseosos de ver pasar al presidente a bordo del automóvil Ford, modelo V8 club Cabriolet de 1937, que perteneció a su bisabuelo Luis Alberto de Herrera y que hace 30 años también utilizó su padre, Luis Alberto Lacalle Herrera, cuando asumió como gobernante.
Más de 3.000 jinetes de a caballo, provientes de los 19 departamentos, formaron una herradura al lado norte del Palacio, y cumplieron así su promesa de estar junto a “Luis” (como prefieren llamar al presidente) en un día tan importante.
Próximo a las 14, en tanto, arribaron al Palacio Legislatorio las autoridades nacionales, las delegaciones extranjeras, entre ellas los presidente de Brasil y Chile, Jair Bolsonaro y Enrique Piñera, respectivamente; así como el ministro de Relaciones Exteriores de Argentina, Felipe Solá, y el Rey de España, Felipe VI; entre otros. También estaban presentes los expresidentes Julio María Sanguinetti, Luis Lacalle (junto a su familia en un balcón) y José Mujica, y el presidente de la Cámara de Representantes, diputado Martín Lema. El Batallón Florida realizó los honores de estilo, mientras el clarín ejecutaba el toque de “Atención General”.
Las autoridades subieron por la escalinata mientras a cada lado se desplegaba la sección de Honor del Batallón Florida y, en el Vestíbulo del Edificio les esperaba una línea de saludo compuesta por la Comisión Especial integrada –entre otras– por la diputada sanducera Cecilia Bottino.
El presidente de la Asamblea en ejercicio, senador José Mujica, levantó el cuarto intermedio de la Sesión Solemne e invitó a los presentes a ponerse de pie para escuchar el Himno Nacional interpretado por la soprano uruguaya Luz del Alba Rubio junto al Coro del Sodre. Posteriormente invitó al presidente y a la vicepresidenta electos a realizar el compromiso de honor y la Declaración de Fidelidad Constitucional, tal como mandata el artículo 158 de la Constitución de la República.
En la culminación del acto, Beatriz Argimón invitó a Lacalle Pou a hacer uso de la palabra ante la Asamblea General, inaugurando así el primer día de su mandato.
“Por séptima vez consecutiva el Uruguay se apresta a vivir un cambio de mando entre dos presidentes electos por el pueblo. Los ocho presidentes de la vuelta a la democracia han cumplido su mandato. Tres partidos políticos distintos se han sucedido en el ejercicio del Poder Ejecutivo y a lo largo de estos últimos 35 años la Constitución ha tenido plena vigencia. Hemos sido reconocidos como una de las democracias más plenas del mundo”. “Somos herederos de una larga historia y tenemos la responsabilidad de cuidarla y continuarla. Uruguay, nuestro país, nosotros. Somos una gran nación construida por mucha gente de muchas ideologías aun antes de ser Estado. Somos conscientes de esto y por eso sentimos una enorme responsabilidad sobre nuestros hombros. En democracia a los gobernantes los eligen, los exigen y los cambia la gente. Por esta razón, la base última y fundamental es una ciudadanía comprometida y responsable que ejerce sus derechos y asume sus obligaciones. A la democracia uruguaya la construyen quienes votan cada cinco años eligiendo libre y de manera soberana a quienes van a representarlos. Lo construyen los militantes políticos y sociales que dejan tiempo de su vida para la causa común. Lo construyen los profesionales de la comunicación que nos suministran información y alimentan el debate público. La construyen los docentes que ayudan a las nuevas generaciones a ejercer ciudadanía y perseguir sus proyectos personales. La construyen también los intelectuales y los agentes culturales que nos ayudan a entender el sentido profundo de nuestras decisiones. La construyen quienes trabajan, quienes emprenden, quienes producen, quienes comercian, porque ellos son los que aseguran la base material necesaria para que podamos cumplir nuestros sueños de libertad, justicia y oportunidades. La construyen los funcionarios públicos en cada rincón del país, que ayudan a sostener esa gran estructura que es el Estado que debe estar al servicio de la gente. La construyen los policías que mantienen el orden y los militares que cumplen sus funciones en estricto respeto al poder civil”, dijo en su discurso.

TIEMPO DE CAMBIOS

Hay que tener siempre presente, prosiguió, “que somos inquilinos del poder, inquilinos transitorios. Debemos recordar que somos los empleados de los ciudadanos y estamos para servirlos. La política y el gobierno son al fin y al cabo eso, servicio, y por eso el gobierno que hoy empieza pretende con sus empleadores, tener una relación transparente de comunicación constante para poder generar confianza”.
El presidente resaltó que el país está ante un momento de cambio político. “Es la primera vez en la historia que el gobierno será ejercido por una coalición compuesta de cinco partidos políticos. Y obviamente como todo lo nuevo genera incertidumbres, y se hace camino al andar. Son los ciudadanos los que empiezan los cambios, y ese comienzo se manifiesta en una voluntad popular y la deposita sobre los hombros de los políticos. Esta vez la ciudadanía nos dio un mensaje claro, contundente. Dijo que es necesario un cambio, pero un cambio acompañado de acuerdos, es hora entonces de cumplir con la voluntad popular. Si la gente eligió un cambio es para la acción y la transformación de la que nos vamos a hacer cargo”, sostuvo.
A su vez destacó que el gobierno entrante debe “continuar lo que se hizo bien, para corregir lo que se hizo mal. Y sobre todo para hacer lo que no se supo o no se quiso hacer en estos años”.
El presidente expresó que, entre otras, hay áreas que son de preocupación. “El gobierno que hoy comienza carga con un compromiso electoral, que es un contrato con los orientales. Es un contrato basado en un diagnóstico de la realidad nacional, y además un conjunto de medidas concretas que ofrecimos a la ciudadanía”.

SITUACIÓN ECONÓMICA

Lamentablemente, dijo el presidente, “la situación económica se ha deteriorado, la inversión ha bajado y más de 50.000 uruguayos han perdido su empleo”. “Este es un problema de la sociedad por supuesto, pero también una tragedia individual y familiar para muchos uruguayos”.
“La cifra de desempleo es la más alta en los últimos años. Debemos actuar sobre los costos de producir, comerciar, industrializar y prestar servicios. Debemos iniciar urgentemente una recuperación de la competitividad nacional”.
“Por eso tenemos un compromiso ineludible con mejorar la calidad y el precio de los servicios públicos, de ordenar adecuadamente los recursos humanos del Estado, de generar apoyo directo a las micro-pequeñas empresas y de generar apertura de mercado en mejores condiciones para nuestros bienes”, indicó Lacalle Pou.
Al mismo tiempo, expresó, que se debe mejorar la situación fiscal porque luce “muy deteriorada”. “El déficit fiscal de nuestro país es el más alto en los últimos 30 años y todos sabemos aquí que el ciudadano ya ha hecho el esfuerzo, un esfuerzo grande para sostener el gasto público y el aparato estatal. Este gobierno tiene un compromiso de manejarse de manera austera. Cuidaremos cada peso de los contribuyentes. Por esta razón, desde el inicio del período impulsaremos una verdadera regla fiscal. Además crearemos la Agencia de Evaluación y Monitoreo de las políticas públicas, que ayudará al seguimiento de procesos en tiempo real para optimizarlos y corregirlos”.

RESTABLECER EL ORDEN

Tal vez el punto más aplaudido por quienes seguían formaban parte de la Asamblea y el público que seguía la transmisión por pantallas gigantes fue el inminente refuerzo de la seguridad pública.
“Nuestro país atraviesa por una crisis de seguridad humana. No tenemos dudas que estamos ante una emergencia. El presupuesto en seguridad pública se ha multiplicado por cuatro desde el año 2005, y a pesar del enorme gasto, el deterioro es cada día mayor. Por esto es que mañana (hoy) mismo –como lo dijimos durante la campaña–, conjuntamente con el ministro del Interior convocaremos a todas las jerarquías policiales del país para darle instrucciones claras respecto a la estrategia y táctica que vamos a llevar adelante para cuidar a la enorme mayoría de los uruguayos que se sienten desprotegidos”. El gobierno pretende introducir cambios en materia penal, de procedimiento penal, y en las herramientas al alcance de la policía, así como “apoyo legal y apoyo moral a los uniformados de azul. Vamos a cuidar a los que nos cuidan”, precisó.
“No estamos dispuestos a ceder territorio a la delincuencia, al narcotráfico, y vamos a perseguir el abigeato que asola gran parte del interior de nuestro país. Vamos a recuperar el control de cada rincón de nuestra patria, y también de las cárceles”, apuntó.

RETROCESO EN LA ENSEÑANZA

El presidente se refirió al campo de la educación y dijo que, pese a las grandes cantidades de dinero invertido, nuestro país pasó de estar a la vanguardia de América Latina “a estar entre los más atrasados en el porcentaje de jóvenes que culminan la educación media”.
“A esto se suma que no hemos podido mejorar la calidad del aprendizaje de aquellos que siguen asistiendo a clase, y la falta de buenos resultados en la educación se convierte rápidamente en una fractura social. Quienes no acceden a una educación de calidad, no tendrán oportunidad de trabajos de calidad en el futuro próximo. Y por eso como lo dijimos en campaña electoral, como lo manifestamos en el borrador de la Ley de Urgente Consideración, vamos a proponer un cambio en la gobernación de la educación para hacerla más ágil y efectiva. Con las nuevas autoridades de la educación vamos a impulsar cambios en el funcionamiento cotidiano de los centros de enseñanza, para así fortalecer auténticas comunidades educativas”.

INNOVACION TECNOLÓGICA

Relacionado con el tema educativo, “Uruguay tiene un enorme desafío en lo que refiere a innovación, tanto el Estado como el sector privado han hecho un camino interesante. Estamos necesitando un salto cualitativo y cuantitativo en este tema”.
“Las tecnologías de la información y la comunicación están presentes en cualquier actividad de nuestras vidas. Aun en las más básicas, como el sector agropecuario, donde el valor agregado muchas veces tiene un componente innovador. Tenemos un sueño que no está lejos de convertirse en realidad, que es convertir a nuestro país en un centro internacional de formación e inversión en las TICS”, dijo. Pero para eso, “tenemos que modificar la currícula educativa con la introducción fundamental de habilidades y conocimientos en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas. Y al mismo tiempo aún más impulsar las carreras terciarias, relacionadas a la ciencia, la investigación y la tecnología”.

POBLACIÓN Y DESARROLLO

Uruguay “padece un desequilibrio poblacional entre las zonas metropolitanas y el resto del país agravándose este mismo en otros lugares”, indicó el presidente. “Claramente esta migración tiene un contenido económico, un componente educativo y sanitario sumado al confort necesario para esta época. Nuestro gobierno va a potenciar todos los instrumentos que tenga al alcance para estimular la radicación de inversiones en el interior del país”, agregó.
Habló del compromiso por hacer viable la hidrovía del río Uruguay “que va a generar fuerte alivio en el costo del traslado de bienes”. “No descartamos tampoco la posibilidad del puerto en el Este del país utilizando ríos y lagunas así como tampoco queremos desaprovechar el puerto de La Paloma en Rocha”, dijo. “Con el debido analisis del tránsito futuro de mercaderías y apostando al estímulo de algunas zonas del país tenemos el compromiso de fotalecer algunos ejes viales, como por ejemplo el de la ruta seis”, sostuvo como lineamiento al tema de la caminería.

VIVIENDA POPULAR Y MEDIOAMBIENTE

“Nuestro gobierno tiene asumido un compromiso claro con cerca de 190.000 uruguayos que a pesar de la bonanza económica de estos años viven en asentamientos. Sabemos que este tema no se resuelve en cinco años, pero es fundamental mejorar y acelerar las situaciones habitacionales para estas familias. La vivienda popular va a tener prioridad en nuestra gestión, recurriendo a todos los mecanismos legales y técnicas de construcción que tengamos a nuestro alcance”, manifestó.
Asimismo, el presidente comentó que su gobierno asume un compromiso ético con las generaciones actuales y futuras.
“No podemos seguir mirando para el costado mientras nuestro medio ambiente continúa deteriorándose. Vamos a jerarquizar el tema creando un ministerio específico, vamos a acelerar la puesta en práctica de proceso amigable con el ecosistema. Premiaremos a los que ayudan a mitigar la acción humana y seremos severos con aquellos que contaminan el ambiente. Urge tener un diagnóstico acabado de la calidad de nuestras aguas. Y actuar en consecuencia”.

FORTALECER EL MERCOSUR

Sobre las relaciones exteriores, Lacalle Pou sostuvo que hay que fortalecer la región, el Mercosur, y al mismo tiempo lograr flexibilizar el bloque para que cada socio pueda avanzar en procesos bilaterales con otros países”.
“Debemos terminar los procesos e internalizar el tratado firmado por Uruguay y el Mercosur con la Unión Europea. Los procesos iniciados deben de terminarse, si no se terminan generan descreimiento. No debe importar el signo político de cada uno de los miembros del Mercosur. Para afianzar nuestros intereses en común debemos de dejarlo de lado, reducidos a las cuestiones particulares de cada país”, precisó.

TRABAJAR POR LA LIBERTAD

Por su parte, al final de su discurso, el presidente dijo que se compromete a respetar el derecho de todos. “El derecho de quienes tienen simpatía por nuestro gobierno y el de aquellos que hubieran preferido que gobernaran otros. Los derechos de quienes viven de su trabajo y los derechos de quienes generan esos puestos de trabajo. Los derechos de hombres y mujeres de distintas creencias y orientaciones sexuales. Los derechos de quienes están presos y los derechos de quienes se ven amenazados o son víctima de delito. Por supuesto que también los derechos de aquellos que combaten el crimen. Los derechos de aquellos que no se animan a dejar su casa sola y los de quienes no tienen una casa para vivir. Los derechos de aquellos que se unen para reclamar en organizaciones de trabajadores o empresarios, y los derechos de aquellos que lamentablemente no tienen voz. Los derechos de aquellos que sufren estrechez en la vejez y los de quienes ahorran para no sufrirla. Los derechos de aquellos que padecen una discapacidad y los de su familia para poder atenderlos”.
A este gobierno, “le corresponde generar herramientas, oportunidades, ser justo y asegurar la convivencia pacífica”. “Dentro de cinco años podrán evaluar los uruguayos nuestro desempeño. Estamos convencidos que si al final del periodo los uruguayos son más libres, habremos hecho bien las cosas. De lo contrario habremos fallado en lo esencial”.
E invitó a todos los uruguayos a trabajar por la libertad. “La libertad de poder vivir en paz, la libertad de poder elegir un trabajo digno, la libertad de poder darle un techo a la familia, la libertad de poder perseguir los sueños personales porque se cuenta con las herramientas para hacerlo, la libertad de expresar las ideas de cada uno sin temor a ser hostigado por quienes piensan distinto”.
“La libertad de crear, de innovar, de emprender y de tender a la excelencia. La libertad de criticar al gobierno cuando se lo merezca. La libertad de buscar la felicidad de cada uno de nosotros, por los caminos que cada uno elija recorrer. Esta es la tarea del gobierno que hoy empieza. Y conducir esa tarea es la función del presidente de la República. Nos hemos preparado para este desafío. Lo asumimos con conciencia y también con mucha confianza. Llegó la hora de hacernos cargo, llegó la hora de hacerme cargo”, destacó Lacalle Pou.

El presidente Lacalle Pou se dirigió a la Asamblea General enfatizando puntos respecto a la situación económica, la inseguridad, la educación, el desarrollo en las tecnologías, los problemas de vivienda y de población, así como la necesidad de fortalecer el Mercosur, entre otros.