El diputado del Partido Nacional, Nicolás Olivera, coincidió con la convocatoria a un diálogo nacional en forma urgente, propuesto por la diputada del Frente Amplio, Cecilia Bottino, en consideración a la situación dramática en sectores de la población, pero principalmente la de aquellos más vulnerables.
“Todas las veces que fuimos convocados por los temas de Paysandú, no hubo una sola instancia en la que no hayamos participado. Lo que importa en estos momentos es estar, porque tenemos una responsabilidad como gobernantes de aportar soluciones”, dijo Olivera a EL TELEGRAFO.
Sin embargo, resaltó que hay otro aspecto que importa “y no es menor, que es la coherencia. La coherencia es haberlo hecho antes y hacerlo ahora, porque si no caemos en el oportunismo. Pero confío plenamente que si se da la convocatoria, es bueno”. El legislador destacó la presencia de siete sanduceros que “ocupan lugares de responsabilidad para dar respuestas a temas de Paysandú. Pero, repito, hay que ser coherentes, porque durante cinco años yo sé lo que pasó y esperemos que en estos próximos cinco años tengamos todos un proceder ajustado a lo que veníamos haciendo”.
EMERGENCIA DESDE ANTES
El 5 de agosto de 2015, Olivera planteó la necesidad de declarar al departamento en “emergencia laboral”, en una exposición presentada en la Cámara de Diputados, mientras se procesaba el cierre de emprendimientos que enviaban al seguro de desempleo a centenares de trabajadores.
“Yo siento que ya estábamos en una emergencia. Cuando lo propusimos hace cinco años –y lamentablemente no contamos con el apoyo de la diputada Bottino– hablamos de emergencia laboral y no se nos llevó el apunte. Pero había señales amarillas con pintas rojas de que Paysandú estaba cayendo en una espiral donde se perdían empleos y emprendimientos sin ningún tipo de aliciente”, señaló.
Explicó que tal decisión “derivó en un mal momento para el departamento porque no es lo mismo que una crisis, como la que estamos pasando, nos agarre un poco mejor que un poco peor. Es como un organismo que tiene las defensas altas y resiste a las patologías. En el caso de Paysandú, nos agarró con las defensas bajas”.
Reconoció que la prioridad es la reactivación del empleo, “que se hace con ideas, pero también se hace con acciones desde el gobierno nacional y con el gobierno departamental. En esto, independientemente de los colores políticos, se precisa caminar de la mano del gobierno nacional”.
FORMAS DE REACTIVAR
Consultado sobre los proyectos existentes para una reactivación laboral y económica, explicó que deben buscarse ventajas comparativas para los inversores. “Hay dos facetas con lo público y privado y lo primero será tratar de hacer aterrizar a la mayor cantidad de inversiones públicas en el departamento. En lo que tiene que ver con lo privado, hay que generar las condiciones para su instalación. Eso se hace con incentivos y ahí tenemos que hablar de una zona franca u otra propuesta que permita posar su interés en Paysandú”.
Explicó que “es un trabajo muy artesanal porque hay que persuadir a los inversores, mostrar el potencial, las oportunidades y es una gran tarea del gobierno departamental. Hemos perdido algún tiempo, pero es momento de empezar a hacerlo”.
Según Olivera, “la estabilidad jurídica y social son los principales activos” del departamento, “de rápida conectividad con Argentina y con reglas de juego claras. Por ahora, seguimos perdiendo oportunidades con la capital del país”.
