El protocolo del fútbol del Interior no fue presentado finalmente ante la Secretaría Nacional del Deporte (SND) el pasado viernes como estaba previsto. “Estaba agendada la reunión para el viernes a las 16.30, pero no vinieron”, se indicó a EL TELEGRAFO desde la SND.
Los profesionales que trabajaron en el protocolo lo presentaron a OFI ya hace más de una semana, y desde allí recaló en la AUF, desde donde sería elevado a la Secretaría. La idea primaria era que se nucleara en un protocolo todo el fútbol amateur, es decir de AUF (fútbol playa, sala, femenino y la Divisional C) y de OFI, aunque está claro que las realidades son totalmente diferentes. Ya partiendo de la base de que si no se puede jugar con público cuando vuelva la actividad, el fútbol del Interior no rodará.
El protocolo de OFI recaló entonces en AUF, donde es analizado por los médicos que llevaron adelante el del fútbol profesional, a la espera de ser entregado. Por lo pronto, el jueves próximo se llevaría adelante la postergada reunión entre AUF y la SND, y allí se conocerá si finalmente el protocolo del fútbol del Interior es presentado como lo confeccionaron los profesionales de OFI o bien se lo incluye dentro de todo el fútbol amateur.
Pero hay un aspecto importante a tener en cuenta: por más protocolo que haya, la competencia depende del aspecto económico. Y para ello se espera saber si cuando vuelva la actividad se podrá contar con público en las tribunas.
Si no hay hinchas que pasen por boleterías para poder solventar los costos, que la pelota vuelva a girar por la Copa Nacional de Selecciones dependerá del dinero que pueda llegar como auxilio desde FIFA. En ese sentido, el organismo que rige los destinos del fútbol universal confirmó que auxiliará a sus federaciones miembro, por lo que la AUF recibirá dólares frescos que alivien su situación económica en tiempos de pandemia de coronavirus.
Y desde allí habrá que confirmar qué dinero se podría aportar a OFI para conocer, en definitiva, si se volverá a la competencia, ya que de nada servirá la aprobación del protocolo si no hay dinero.
