El Departamento General de Obras de la Intendencia instala a los fondos de la antigua biblioteca municipal “José Pedro Varela” –hacia donde se traslada la Unidad de Diseño y Proyectos– un laboratorio de ensayo de materiales y suelos. El encargado de la citada unidad, el arquitecto Manuel de Souza, señaló que “es una meta que teníamos desde el punto de vista técnico. En vista de que tercerizábamos los servicios de ensayos sobre el suelo y otros materiales, nos pareció necesario contar con un equipo propio, incluso por todo el volumen de cosas que manejamos y por contar, además, con el personal municipal”.
Consultado sobre la puesta en marcha de la iniciativa, reconoció que “no me gusta hablar de plazos para el comienzo de su funcionamiento, pero el soporte físico está pronto y contará con una oficina propia, con los implementos informáticos para sistematizar y hacer la evaluación de los datos. Ahora centralizamos todos los materiales y los instrumentos que estaban en otros lugares en este contenedor. Porque, por ejemplo, las herramientas para los ensayos de probeta con el hormigón están en un lugar que no es el más adecuado”.
LABORATORIO PROPIO
Explicó que la unidad que instalan servirá “no solo para este tipo de ensayos sino para tener el dato que corroborara a los otros ensayos. Si bien, por ejemplo, en los pliegos de licitación se piden estos estudios a las empresas, queríamos cotejarlos con ensayos nuestros. A su vez, somos partícipes en la elaboración de cada uno de los procedimientos”.
De Souza aclaró que ya existen las herramientas necesarias para su ejecución, como “una prensa hidráulica para hacer ensayos de probeta, entre otras. El tema es que había que juntarlo todo en un mismo lugar y para eso la Intendencia adquirió un contenedor acorde a las necesidades de un laboratorio idóneo y ahora realizaremos los ensayos de suelo en un solo lugar. Es importante para la Intendencia y los técnicos porque tenemos un respaldo de algo que podemos gestionar nosotros con otra libertad”.
La contratación de estos servicios se efectúan “con un procedimiento de compra que lleva su tiempo. Este laboratorio es el día a día. Si necesitamos hacer el ensayo de la base de una calle, es solamente la decisión y no un llamado para que otro laboratorio lo haga. Es un antes y un después en lo que refiere al control de las obras que llevamos a cabo, principalmente con la Dirección de Vialidad”, dijo a EL TELEGRAFO.
El técnico agregó que, además, “será más económico para la Intendencia porque no hará una erogación puntual para estos ensayos y estará dentro de los costos fijos que maneja el Departamento de Obras”. Describió que los materiales a ensayar “son hierro, hormigón y en el caso de los suelos, por ejemplo, se aplicará sobre una cantera. Allí se sabrá si cumplen los requisitos necesarios para las compactaciones o si adquiere la calidad para determinado fin. O se ensayarán sobre materiales bituminosos para la conformación de la carpeta asfáltica”.
La unidad, integrada por ingenieros civiles y arquitectos, además de ayudantes, técnicos en construcción y estudiantes, se completa con “una funcionaria que está específicamente preparada con la idoneidad para trabajar en el laboratorio. Ya tenemos el personal para trabajar allí” y tendrá un control desde la elaboración de los proyectos en el papel hasta su ejecución en el territorio.
Si bien el objetivo inicial es abrir el espacio a las necesidades técnicas de la comuna, en un futuro puede compartirse y generarse otro polo de desarrollo. “Incluso podemos hacer servicios hacia afuera, ya sean gratis o no. Si la Universidad o estudiantes necesitan hacer estos ensayos y estudiar los materiales con fines didácticos, la Intendencia puede ponerlos a disposición y hará su aporte tal como lo hace la Facultad de Ingeniería, por ejemplo”.
