Limpieza del humedal de La Curtiembre

Un grupo de vecinos nucleados en Humedales de La Curtiembre llevó adelante una nueva jornada de limpieza voluntaria de esa zona costera. Por tercera vez se concentraron en la costanera, entre Antonio Estefanell y el arroyo, “donde advertimos sobre la formación de basurales endémicos y para cortarlos, hay que limpiar y decidimos volver al lugar”, dijo a EL TELEGRAFO, uno de sus integrantes, Hugo Gómez.
El grupo heterógeneo, “está muy comprometido y cuenta con personas con conocimientos que los vuelcan al trabajo con el medio ambiente, en forma desinteresada y con grandes satisfacciones. Queremos transmitir ese interés a los jóvenes, empoderar a otras personas sobre la necesidad de reinstalar estos lugares y revalorizar los humedales”.
El trabajo finalizó “con dos volquetas llenas de basura, o unos 600 kilos aproximadamente, pero en otras ocasiones hemos sacado hasta una tonelada de chatarra, neumáticos y plástico de todo tipo. Además de las colillas y tapas de las botellas que parecen tan invisibles y sin embargo, van directo al río y perjudican nuestro ecosistema”.
Gómez exhortó a la población a que “no tire más mugre porque a la tarde hicimos una recorrida y en el mismo lugar que limpiamos ya había residuos otra vez. También es cierto que no hay lugares para tirar la basura, como tachos de residuos. Pero si los ubican allí, desaparecen o los dan vuelta. Es decir, es un problema cultural”.
El integrante del grupo encargado de la limpieza voluntaria, aguarda “llegar a concordar con las nuevas autoridades y acceder a una cartelería que explique el valor de este humedal. Porque son patrimonios que no están en todos lados, ya hemos perdido humedales en Paysandú con el relleno de los terrenos. Es decir, queda mucho por hacer”, concluyó.