El proyecto se mueve de un lado al otro en la AUF desde la presidencia de Wilmar Valdez. Pero después de muchas idas y vueltas (justo es decirlo, debido a la pandemia), finalmente la Copa Uruguay, que integrará al fútbol capitalino con el del Interior, será realidad a partir del mes de abril del próximo año.
Los dirigentes de la AUF, liderados en este caso por el neutral Jorge Casales, que tiene a su cargo la tarea, siguen dando pasos firmes en ese sentido.
“De la misma manera que no se dio la otra vez, esperamos que ahora sí se pueda dar. Es el mismo proyecto que teníamos antes, y se va a trabajar de la misma manera. La idea es que en el mes de abril del próximo año estemos comenzando con esto que tenemos proyectado”, dijo el propio Casales a EL TELEGRAFO al ser consultado al respecto.
El formato es el mismo que se había proyectado inicialmente. A grandes rasgos, Casales recordó que “primero comienzan los equipos de OFI y la Primera División Amateur que se eliminan, y los que quedan se suman a los campeones de OFI y los equipos de la Segunda División Profesional. Y finalmente se integran los equipos de la Primera División, allá sobre noviembre, para finalizar la competencia en diciembre”.
¿Qué resta para que se confirme definitivamente y de manera oficial la Copa Uruguay? Casales advirtió que “lo que tenemos que conseguir es la financiación, estamos atrás de eso y se realizará a través de algún sponsor local. Está casi cerrado y queremos tenerlo confirmado para proponerlo y darle el formato”.
Tanto Casales como el resto del Ejecutivo que lidera Ignacio Alonso tienen en claro que la Copa Uruguay se trata “de la verdadera integración”.
“Es un modelo con el que no inventamos nada, porque se hace en otros países. Es una competencia atrayente, y además deportivamente lleva a querer superarse. Si jugás siempre contra los mismos, no te inventiva a superarte”, remató.
Los participantes
El proyecto de la Copa Uruguay comenzó a dar pasos firmes en 2019, con la idea de que en 2020 comenzara a transitar, lo que fue impedido por la pandemia de coronavirus.
En aquel momento se había explicado a través de la AUF que en la primera fase de la competencia comenzarían a competir los equipos de la Divisional A de OFI ubicados de la tercer a la 18ª posición, así como los mejores clasificados de la Divisional B.
Mientras tanto, en AUF comenzarían a jugar los equipos de la Segunda División Profesional y Primera División Amateur, menos el mejor ubicado de los descendidos de la Divisional A y el campeón de la Segunda División Profesional.
En una tercera fase participarían el mejor ubicado de los descendidos de la A de AUF y el campeón de la Primera División Amateur, los 16 equipos de Primera División de AUF y el campeón y vice de la Divisional A de OFI.
