“A los funcionarios les vengo a dar la tranquilidad de que la planta va a seguir operando y les vengo a demostrar que estamos trabajando para que siga funcionando”, dijo a EL TELEGRAFO el presidente de Ancap, Alejandro Stipanicic, quien dialogó abiertamente minutos antes que se reuniera con el sindicato de Fancap que expresamente pidió “que la prensa se retire”, ante lo cual Stipanicic consultó a los periodistas presentes “si no tienen inconvenientes de esperar que termine la reunión; pueden hacer algunas tomas” fotográficas y de video.
“Los funcionarios de Ancap son siempre responsabilidad de Ancap, por lo que queremos mantener a esos funcionarios. Obviamente vamos a pedir al privado para que use la mano de obra que está ocupada hoy y que no traiga mano de obra de Brasil, de Argentina o de otros sectores de la actividad. Sí vamos a facilitar al privado la selección de personal que esté en la plantilla de Ancap. Eso lo vamos a hacer, pero es parte de la negociación que vendrá en el futuro”, aseguró Stipanicic, quien llegó en la mañana de ayer a la planta Ancap de Nuevo Paysandú después que el Directorio decidiera que ante la situación de la empresa se hace imprescindible generar condiciones atractivas para la llegada de un socio que permita defender la participación de mercado en Uruguay y disponer de condiciones competitivas para la exportación a escala económicamente atractiva.
UN PRIVADO QUE TRAIGA OTROS MERCADOS
Fue categórico al indicar que “se decidió ir por el camino de buscar un socio privado para que nos traiga otros mercados, para mantener la actividad industrial, los puestos de trabajo, para sostener la marca Ancap en el mercado, para defender el portland Ancap y para rescatarlo de una mala situación que se viene arrastrando desde hace demasiados años y que nunca se le hincó el diente”.
“No me interesa revisar cosas del pasado, pero en el tema de portland hubo mucha inversión en un programa que quedó trunco. Eso nos dejó en una situación competitiva muy desventajosa frente a nuestros competidores privados y la verdad de la milanesa es que cada día que pasa perdemos más mercado, más plata, en tanto los competidores privados ganan más plata, mercados, hacen más inversiones, tienen más tecnologías, son más eficientes y nosotros no podemos contra eso”.
Para esa asociación, “Ancap va a ofrecer todos los activos que tiene (incluyendo el nunca armado tercer horno en Paysandú), como parte de la contribución para integrar esa asociación. Todos nuestros activos industriales y comerciales; vamos a pedir un valor llave por la participación de mercado de Ancap y vamos a pedir un retorno por los yacimientos de piedra caliza. El privado va a ofrecer inversiones, su marca, su know how y sus mercados”. Asimismo, “le vamos a exigir al privado que queremos que las plantas sigan funcionando con todo el personal de la zona, para que esto realmente sea una prosperidad; queremos rescatar al portland de Ancap”.
“SI NO HACEMOS NADA, SE VAN A QUEDAR SIN TRABAJO”
Fue claro al indicar que “si no hacemos nada (los empleados) se van a quedar sin trabajo porque se acabó el tiempo de la inacción. Siempre hablamos del sobrecosto en los combustibles, pero el país está pagando un sobreprecio en la industria de la construcción. Solamente con el costo del cemento alrededor de 40 millones de dolares por año de más”, aseguró el presidente de Ancap, quien agregó que también “en el biodiesel estamos pagando 20 o 25 millones de dólares más en el gasoil para agregar biodiesel (por año). Estamos poniendo condiciones favorables para que los privados tengan ganancia y puedan hacer las inversiones que cada vez los distancia más de nosotros”, subrayó.
“Hace seis u ocho años atrás Cemento Charrúa no importaba cemento, pero en cuatro meses nos quitó 4% del mercado, tiene costos mucho más eficientes. Cielo Azul no existía. Uruguay tenía tres plantas de cemento que podíian producir más o menos 900.000 toneladas por año. Uruguay consume entre 800.000 y 850.000 toneladas por año. Ahora, desde hace 3 meses, hay una cuarta planta súper moderna, bien equipada, con una inversión de 140 millones de dólares”, dijo luego. “Uruguay tiene ahora una capacidad de producción de 1.400.000 toneladas. Racionalmente, en esta situación, ¿cuál es el primer competidor que se cae cuando hay tanta oferta? ¡El más débil!”
“NO HAY NINGÚN CANDIDATO”
“Estamos lejos de concretar y de elegir al privado. No hay ningún candidato que esté ni abrochado ni apalabrado. Venimos analizando todas las situaciones. Tras asumir, le encargué a un grupo de profesionales que hiciera una serie de estudios sobre el negocio del portland. En julio (de 2020) cuando mis compañeros de Directorio se integraron, hicimos una presentación al sindicato y le mostramos la información que en ese momento teníamos. Había seis escenarios económicos analizados; los seis daban pérdidas”, sostuvo Stipanicic. “Cuando el sindicato negó, cuestionó, dudó sobre esa realidad lo integramos a un equipo de trabajo y en febrero (de 2021) ese equipo de trabajo emitió sus conclusiones. Desde entonces estamos esperando ideas, propuestas, estudios que nunca llegaron. La propuesta de rentabilizar el portland que hay en la vuelta son de un muy compatible y muy deseable plan de viviendas e infraestructura, pero no está concretado y en definitiva es irrealizable”.
Para concretar esa inversión “estamos hablando de varias veces el presupuesto nacional de infraestructura para obras para crear un shock que promueva la venta de portland. Pero un shock no le da de comer comercialmente a una planta industrial como esta (la de Paysandú), es temporal nada más. En el largo plazo nosotros necesitamos crear una demanda permanente”.
“SIEMPRE EL MÁS CHICO DE LA CLASE”
Aun cuando la decisión de interesar a un privado en una asociación fue tomada el 21 próximo pasado, “veníamos conversando con algunos interesados que esperaban qué iba a hacer Ancap. De hecho, hay firmados tres acuerdos de confidencialidad: uno está acordado y no firmado debido a que por la pandemia no hemos podido intercambiar los documentos, otro acuerdo de confidencialidad que fue negociado y un tercero con un privado interesado en saber de la situación. Hay jugadores que no se han acercado aun, pero sabemos que pueden estar interesados. Los vamos a tratar de atraer”.
Empero, “en estos mercados lo que ocurre es que Uruguay siempre es el más chico de la clase. Pero vamos a ser muy selectivos. A la marca Ancap no la podemos asociar con cualquier otra, la tenemos que proteger. El proceso de selección va a ser cuidadoso. También en ese sentido vamos a tratar de jugar con los mejores”.
“El mercado del cemento en el mundo no es un mercado que tenga tantos actores; las empresas importantes que tiene son pocas, pero jugadores importantes”, explicó el Presidente de Ancap en su entrevista con EL TELEGRAFO.
“Vamos a tratar de atraerlos, están en la región. Si se aprecia la composición accionaria de las empresas que están en Uruguay, Argentina o Brasil, los jugadores están todos emparentados, son jugadores conocidos. De hecho, nosotros en Cementos del Plata tenemos una sociedad con Loma Negra, del grupo Camargo Correa; y tenemos enfrente a Cementos Artigas que es del grupo Votarantim y el grupo Molins. En Argentina también está Holcim, en Uruguay Cimsa asociada con brasileros. Vamos a tratar de seducir a estos grupos con legítimos argumentos. Esa es la apuesta para el rescate de Ancap”.
Pero la decisión no será posible tomarla en poco tiempo. “Es un proceso que nos va a llevar un año por lo menos. Hasta tanto eso ocurra esta planta (la de Paysandú) como la de Minas van a seguir operando con normalidad. Necesitamos que operen porque queremos defender la marca Ancap en el portland y en el mercado nacional. No vamos a dejar tirados a nuestros clientes. Todas las barracas van a tener portland Ancap como lo tuvieron siempre y vamos a salir a pelear nuestra cuota de mercado”.
