Bomberos voluntarios de Salto estuvieron en la primera línea del combate al incendio

Un grupo de bomberos voluntarios se desplazó desde Salto, de la denominada Unidad 243, para sumarse a los efectivos de los destacamentos de toda la región en el combate al gran incendio forestal que se desarrolló en zonas de nuestro departamento y Río Negro.
Los salteños estuvieron casi desde el primer momento. “Estuvimos el día 30 hasta el 2. En principio fuimos un grupo de seis voluntarios de Salto, en un ómnibus de Salto Grande, el chofer trabaja en Salto Grande y es bombero voluntario, también pasó a buscar a los voluntarios de Paysandú”, que se plegaron a las tareas, comentó Mauricio Rodríguez, el presidente de la asociación que conforman.
“En ese primer viaje no fui, yo fui el 2, fueron mis compañeros, y allá en el siniestro había dos bomberos voluntarios de la unidad, pero que en estos momentos están trabajando como zafrales”, agregó.

LABOR

Participaron “en todas las tareas de sofocación, tanto con manguera, con chicote, con mochila de agua, todo lo que hacen los bomberos”, y lo hicieron con su unidad propia, “el camión 243 (del que tomaron el nombre Unidad 243), que nosotros reparamos, y también trabajamos con la camioneta” que aportó Salto Grande. Al estar varios días en el terreno, tuvieron que trabajar en varios frentes. “Estuvimos en Algorta, Piedras Coloradas y Orgoroso, como fuimos tantos días estuvimos en los tres lugares”, relató.
Rodríguez indicó que se pusieron a disposición del Jefe Regional cuando empezamos a ver a través de los medios la dimensión que estaba cobrando el fuego. “Nos dijo que sí, que hacía falta, y fuimos. Salto Grande puso también el combustible, porque sabe el trabajo que nosotros hacemos, que estamos todos los días acá en Salto tratando de dar una mano”. En el caso de la camioneta, está dotada “con un polivalente, un tanque de agua de 600 litros y una bomba de agua, todo lo que nos donó Salto Grande”, agregó.

HONORARIOS

Consultado sobre su carácter de voluntarios, Rodríguez explicó que “nosotros no tenemos ningún beneficio, lo hacemos porque nos gusta, de corazón y para dar una mano. Es todo gratis, cada uno tiene su trabajo y de la manera que puede, o sale del trabajo, habla con el encargado, o deja muchas veces el trabajo para otro día, y así más o menos tratamos de manejarnos y siempre cubrir”. Sí reciben algún aporte en materiales de trabajo e instrucción. También han recibido donaciones desde el exterior, por ejemplo de la Fundación 911 de los Estados Unidos.