La violencia puso en jaque a los clásicos de verano

El Centenario todavía no sabe si recibirá al clásico del 22, en jaque por la violencia.

“Ojo, que de repente no se juega”, fue la respuesta del presidente de la AUF, Ignacio Alonso, al ser consultado por EL TELEGRAFO por el clásico previsto para el 22 de enero.

Y todo parece indicar que, salvo un cambio de rumbo en las próximas horas, la disputa del clásico de verano del 22 en el Estadio Centenario, pero también el del 26 en Maldonado, no se disputen.

¿El motivo? La violencia. Ya desde el Ministerio del Interior se había dejado en claro que existía la posibilidad de que no se jugaran, debido al asesinato que involucra a las barrabravas en los últimos días, y a algunos mensajes que circularon en las redes. El clásico de Maldonado estaba pendiendo de un hilo dado que se entiende que jugar allí es complicado por la problemática que se presenta en diferentes aspectos en medio de la temporada de verano, y por los antecedentes.
Ahora bien: la Comisión de Seguridad de la AUF, recomendó no jugar ninguno de los dos clásicos, ante el clima enrarecido. Igual, hoy el Ejecutivo de la AUF que lidera Ignacio Alonso se espera comenzar a definir la situación, con todas las cartas sobre la mesa. Y hoy o a más tardar mañana tomará una determinación sobre los clásicos de verano. El de Maldonado está prácticamente suspendido, pero se pensó en su momento que pasara también al Centenario. Y si bien la nueva cancha del monumento al fútbol mundial estaría en condiciones de recibir dos partidos, en la AUF apuntan a no darle demasiada actividad pensando en la selección uruguaya y su partido del 1º de febrero frente a Venezuela por eliminatorias. Lo cierto es que la violencia practicada por unos pocos, puso en jaque al fútbol. Un clásico quedaría por el camino, y el otro está ahí, en veremos, a la espera de una resolución.