El mes de febrero comenzó en Paysandú con 334 nuevos casos de COVID-19 y tres fallecimientos vinculados al virus. “La gente puede querer conformarse con que es una gripe –o gripecita como dicen– pero se equivoca; estamos ante un virus mutante de mucha peligrosidad y que debe ser tomado muy en serio, porque cada variante que aparece es más contagiosa que la anterior e impacta de manera suave entre los jóvenes pero puede ser letal entre personas mayores o aquellas con comorbilidades”, subrayó Carlos Leoni, director departamental de Salud.
Hizo hincapié que “el hecho que la B2 está reemplazando a la B1 (ambas Ómicron) se debe a que es más contagiosa. No puedo decir si es más letal y tampoco que esté en Paysandú. Pero no hay que ser ningún adivino para darse cuenta que como llegó la primer Ómicron, llegará esta variante. Vuelvo a hacer hincapié en que al ser aun más contagiosa puede diezmar tanto al sistema de salud como a procesos productivos. Este es un enemigo silencioso, todos tenemos que tenerlo claro y tomar muy en serio la prevención”.
Con los 334 nuevos contagios, Paysandú tiene 1.899 activos, 19.439 casos desde el comienzo de la pandemia, 16.352 recuperados y 188 muertos, contando los tres de la víspera que al cierre de edición no se había determinado aun dónde ocurrieron esos fallecimientos. “Obviamente, no fue en ninguno de los dos prestadores de salud, eso lo confirmamos. Estamos investigando si fueron en domicilio o en el interior del departamento”, aseguró Leoni.
Se mantienen seis pacientes COVID-19 en CTI, tres en el hospital y tres en Comepa. En cuanto a los internados en sala COVID-19, hay 15 en el hospital y 9 en Comepa.
