Comenzó la colocación de los tubos prefabricados de hormigón de 2,50 x 1,20 metros debajo del colector industrial en la zona del Paseo de los Niños. Como fuera informado, el ducto de drenaje cruzará transversalmente el cantero y continuará hasta el río Uruguay. Estos tubos prefabricados se colocarán entre el cantero central aludido y por calle Tacuarembó hasta Silván Fernández. En otras áreas del proyecto se usarán tubos plásticos de menor porte.
En calle Silván Fernández ingresarán al sistema dos conectores laterales a lo que se denomina micro drenaje que llevan el agua de lluvia a este colector primario. Uno de ellos va por Silván Fernández entre Lucas Píriz y Tacuarembó, y el otro irá por calle Libertad desde avenida Salto hasta Tacuarembó.
“Se eligió una alternativa que minimice riesgos con menor impacto hacia los vecinos”, indicó Horacio Mársico, director general de Obras. Asimismo hizo hincapié en el hecho que “los trabajos comenzaron en una zona sensible debido a que concurren niños, por lo que se solicita que, más allá de estar debidamente señalizado, un especial cuidado con los niños”.
“Son tubos de hormigón prefabricados de gran porte que van asentados sobre el suelo cementado y luego se van colocando de a uno de manera meticulosa en la nivelación y el sellado entre las unidades”, explicó Gustavo Belvisi. “Venimos trabajando a un buen ritmo, que lo iremos mejorando esta semana con una grúa que permitirá acelerar los tiempos y mejorar la obra misma, teniendo en cuenta que hay filtraciones y tenemos que sacar el agua a medida que avanzamos con la obra”. De todas maneras aseguro que “estamos conformes con lo realizado”, aseguró.
Una vez culminada esa parte se continuará por calle Tacuarembó hasta Carlos Albo con estos grandes tubos prefabricados. Precisamente allí se encuentra la intersección en donde se realiza “la mayor captación de agua, dado que es el punto más neurálgico del problema”.
En Silván Fernández, el sistema de desagüe pasará a tubos más chicos, de 1,50 x 1,20 metros, utilizando la misma técnica para luego continuar con un entubado circular de polietileno de alta densidad hasta Tacuarembó y Setembrino Pereda.
“El hormigón admite más agua, tiene una durabilidad infinita, ayuda al escurrimiento del agua e influye en la calidad del drenaje, en una forma que permite un régimen laminar, es decir, lento de evacuación que resulta más ventajoso a los fines de una rápida evacuación de aguas pluviales”, explicó Gustavo Belvisi.