Peñarol no encuentra el rumbo. Deportivamente sigue en caída libre, y para colmo de males el partido que perdía en el Parque Viera ante Boston River por 2 a 1, fue suspendido a los 87 minutos por falta de garantías en partido válido por la 13ª fecha del Torneo Clausura.
Los hinchas carboneros no encontraron mejor forma de protestar en contra del equipo de Leonardo Ramos que tirar proyectiles a la cancha. Y afuera, cuando se decretó la suspensión, tiraron fuegos artificiales, apedrearon al ómnibus en el que el plantel se trasladó bajo custodia de la Republicana, e increparon a referentes como Gargano y Aguirregaray.
En la cancha, el equipo fue una sombra en el primer tiempo. Abrió la cuenta el local a los 30’ por parte de Olivera, y algo de aire llegó cuando Rossi empató a los 46’. Pero a los 82’, de penal, Agustín Rodríguez puso el segundo para el “sastre”. Después, lo dicho. Los hinchas reaccionaron de la peor manera, lo que llevó a que en un par de ocasiones el árbitro Leodan González consultara si las garantías estaban dadas para continuar.
Pero se le informó incluso que un hincha tenía un arma de fuego en la tribuna. Peñarol, que había sido penado con 100 UR por las bengalas y la bandera de Nacional que lucieron sus hinchas en la tribuna ante Plaza, está que arde.
En tanto, Montevideo City Torque le ganó de visita a Plaza por 2 a 0 y se aseguró la permanencia en Primera División.
Y en el Franzini, Defensor y Danubio igualaron 1 a 1.
Hoy se complementará la 13ª fecha. River Plate irá por un triunfo ante Liverpool desde la hora 15 en el Parque Saroldi buscando volver a ser líder en soledad, en tanto Albion, que con la victoria de los citadinos descendió, recibirá a Nacional desde la hora 19 en el Estadio Centenario.
El último partido de la etapa será el que disputarán Wanderers y Cerrito a partir de la hora 21.30, en el Parque Viera.
La interrogante ahora es qué sucederá con lo que se viene, teniendo en cuenta que el árbitro suspendió el partido entre Boston River y Peñarol, y las tres últimas fechas no se pueden disputar con un pico o partido pendiente, lo que llevaría a que se convoque a un Consejo de Liga.
