Demostración de perros de trabajo

Del 14 al 16 de octubre se desarrolló en nuestra ciudad la 76ª Expo Rural, donde además de las tradicionales actividades, se presentaron otras propuestas. Una de ellas fue la demostración de “perros de trabajo con ovinos”.

Los perros para el trabajador rural no sólo son compañía, sino que trabajan a la par: acorralan, encierran, apuran, acechan y retornan al ganado rebelde a la manada. Existen razas que están más preparadas que otras, tienen una predisposición innata para trabajar con ganado, las más comunes son el Border Collie y el Kelpie Australiano, porque son perros que tienen bloqueado genéticamente el hecho de cazar, solo acechan, tienen inhibida la condición de cazar y matar; por lo tanto es más sencillo adiestrarlos, deben aprender únicamente cinco o seis órdenes del tipo: “derecha” o “izquierda”. Además estas razas, se destacan por ser sanos, enérgicos y flexibles; desde los 4 o 5 meses empiezan a trabajar y lo hacen durante 9 o 10 años.

EL TELEGRAFO estuvo presente y pudo ver in situ el trabajo de estos canes, quienes sin siquiera ladrar, logran reunir al grupo de ovejas, y guiarlas hacia donde deben ir.

En la oportunidad, pudimos hablar con Gustavo Tejería, productor de la zona, que fue el encargado de demostrar el trabajo que realizan. Gustavo en particular, tiene perros de raza Border Collie y nos habló del proceso de entrenamiento: “comenzamos con lo que se llama ‘despertando instinto’, largamos al perro desde que tiene 3 o 4 meses a un corral donde están las ovejas y los dejamos que jueguen entre ellos. El entrenamiento firme, depende de la madurez del perro, generalmente al año de vida y dependiendo del tiempo que se le dedique, lleva unos 8 o 10 meses de entrenamiento”. Tejería tiene cuatro border collie y una “parida” que fue la primera que entrenó.
“Para trabajar en el campo son invaluables, yo tenía ganado forestal y era imponente lo que ayudaban. Yo iba por el camino y eran ellos los que entraban al monte a sacar las vacas, y en campo limpio no correteás nunca para atajar un bicho, los atajan ellos, se dan cuenta incluso antes de que el animal dispare, te dan una mano bárbara. En todas las tareas, por ejemplo en casa yo voy a dosificar las ovejas solo, ellos me van ayudando de atrás, son una gran herramienta de trabajo”.

Según dijo Tejería consultado en relación al respeto del perro hacia el humano, es porque los canes lo que quieren es complacerlo, y en cuanto al respeto del ganado hacia los perros, se da porque los perciben como depredadores, aunque no muerden, ni ladran.
Este año, en Paysandú, en el kilómetro 378 de Ruta 3, durante el mes de julio se dictó un curso de entrenamiento organizado por el entrevistado que trajo a un especialista de Maldonado al que concurrieron muchos interesados. Tejería dijo que “no le gustan los perros desordenados, soy un convencido que nunca es problema del perro, sino de quien no sabe enseñarle, por eso siempre busco seguir aprendiendo haciendo cursos en otras partes del país o acá mismo”.

En esta exhibición, para hacerla más real, los perros pertenecían a Tejería, pero la majada de ovejas era de otra persona, es decir, no eran los animales con los que suelen trabajar, sin embargo, supieron lucirse.