Ante la situación recurrente de políticos que proclaman tener determinada formación académica y su respectiva titulación, que luego no lo pueden acreditar, el edil departamental de la Lista 51 del Partido Nacional, Esc. Andrés Giménez, destacó que está trabajando en un anteproyecto de ley para evitar que ocurran estas situaciones, y en este sentido, al no ser legislador nacional, indicó que procurará plantearlo en el seno del Directorio de su partido, para que obre como base de trabajo a efectos de redactar el correspondiente proyecto de ley.
Expuso a que “estamos trabajando con mi equipo de asesores en la elaboración de un proyecto de ley para evitar estas situaciones que comprometen la ética política y exponen a la generación de situaciones de descreimiento en la política en general respecto de toda la población, sean votantes o no”.
Trajo a colación que seguramente el caso del ex vicepresidente Raúl Sendic ha sido el más paradigmático en la problemática, “por tratarse de quien ocupaba nada más ni nada menos que el cargo de vicepresidente de la República y a su vez presidente de la Asamblea General en su momento. Y sobre todo siendo el ‘delfín’ nada más ni nada menos que del dueño del MPP. Pero se han sumado otros casos como el del mismo Daniel Olesker, quien se perfilaba para ser el primer ministro de Economía de la era Vázquez, pero fue bajado quizás por el conocimiento en el círculo íntimo del presidente de que carecía del título de economista”.
Asimismo, subrayó que la realidad ha demostrado que “ningún partido está exento de esto –si bien cada caso es particular–, y por otro lado surge la imperiosa necesidad –al parecer– de tener un título universitario con el afán de tener prestigio, como lo indican algunos estudios al respecto que se han publicado en nuestro país en forma reciente”.
Sobre el tenor del proyecto explicó que “considero que la clase política no debe mirar para el costado ante la recurrencia de estas situaciones, porque si un político miente respecto de su formación, es porque le interesa más la política como desarrollo en lo personal, que servirle a la gente, que es tal cual está pensada la política. Es por esto, que como así se legisló en nuestro país en forma reciente (ley 18.485) y es obligación de que cada partido presente ante la Corte Electoral, de donde vienen sus fondos de financiamiento, así como la inscripción de los programas de gobierno, se debe obligar a que cuando se inscriban las listas ante la Corte Electoral (en cada contienda Electoral), a todo aquel que quiera anteponer su formación curricular para así figurar en la lista, se deba acompañar las constancias necesarias (copia fiel y/o autenticada de su título que acredita ser), bajo pena de no tener por inscripta dicha lista si no se acompaña dicha documentación, para de alguna forma operar como un primer freno o filtro”.
Acotó que “así, el que quiera verse en la lista de su elección como escribano o licenciado en genética, u otra profesión sabe que debe acompañar la documentación acreditante de lo que dice ser y que al ingresar a un organismo público toda esta información, ésta puede ser consultada si la Justicia lo ordena. Pero la obligación también debe ser con copia a la Junta Nacional de Transparencia y Ética Pública (Jutep), y otorgarle facultades a este organismo para intervenir en la investigación y denuncias de estas falsas atribuciones académicas, ya que debe ser un organismo con roles importante en el marcado de la impronta de la ética política. Esto implica tener un rol proactivo por parte de todos los partidos políticos en un contralor primario, y luego darle intervención al Estado mismo para salvaguardar la ética misma”.
Trajo a colación que “en mi función como escribano, debo controlar el origen del dinero en muchas operaciones negociables, así como si los sujetos son personas expuestas policíacamente para tomar recaudos y evitar el lavado de dinero. Por eso, si este tema de falsas atribuciones de títulos en verdad interesa frenar, y hablamos de que compromete la ética, se debe legislar en un sentido claro. Como decía, si a los partidos se les obliga a hacer una declaración del origen de sus dineros para el financiamiento de las campañas electorales, se debe legislar en esta problemática y no mirar para el costado”.
Sobre la instrumentación de la iniciativa, destacó que “estoy dispuesto a generar el disparador necesario para que se ponga coto a estas situaciones. Con mis asesores estamos tratando de darle forma a este proyecto, ya sea para presentarlo en la Junta en la media hora previa o en asuntos entrados, recordando que estamos en receso, así como presentarlo ante el Directorio de mi Partido para que lo pueda presentar ante la agrupación parlamentaria y que algún legislador o varios-eso esperamos- lo haga suyo y se presente en la Cámara respectiva para darle inicio al trámite parlamentario”.
