Otros vertidos descubiertos en La Curtiembre serán reparados con ampliación de licitación


“Actualmente se está en la parte final de la licitación oportunamente convocada y otorgada que debe reparar varios puntos en los interceptores La Curtiembre y Sacra”, por 1.100.000 pesos, “pero eso no significa que se darán por terminados los trabajos, en la medida que es probable que se haga una ampliación de licitación si las inspecciones que estamos realizando confirman que en La Curtiembre hay otros vertidos que deben ser reparados”.
Así lo indicó Víctor Cestau, jefe técnico departamental de OSE en Paysandú. Relató que “se hicieron trabajos en el interceptor Curtiembre y en el interceptor Sacra, en este último en proceso de ejecución, considerando lo que fue el llamado a licitación”.

“Ahora se está haciendo un relevamiento de otros lugares que pueden necesitar reparación en el interceptor Curtiembre. De ser así se procederá a realizar una ampliación de la licitación actual. Lo que se hizo fue lo que marcaba el objeto de la licitación es decir reparar tres aplastamientos que provocaban vertidos. Eso se completó, pero no quiere decir que de ser necesario no se continúe con otras obras similares, mediante –como digo– la ampliación de esta licitación. Precisamente el que esté aun en ejecución facilita las cosas, porque se podrá adjudicar rápidamente aquellas obras que sean necesarias”.

“El proceso técnico exige que se estudien los registros, determinar si están vertiendo por obstrucción o aplastamiento. Después de establecer la situación de cada uno de los registros de saneamiento, como es el comportamiento del sistema, se determinará qué reparaciones amerita y entonces se puede dar lugar al instrumento de la ampliación”, explicó Cestau.

También dio detalles técnicos referidos a la pertinencia de establecer los interceptores de saneamiento junto a cursos de agua, que al romperse la contaminan.

El pasar los caños junto a los arroyos “es un procedimiento normal y fue la solución técnica que permitió ampliar el saneamiento al norte de la ciudad –y en algunos casos también al sur–; cuando se encuentra una cañada se encuentra un punto bajo de escurrimiento y en este caso era necesaria su utilización. Hay que recordar que la ampliación incluyó pozos de bombeo para poder trasladar el vertido hasta el final de la línea. Hay dos estaciones de bombeo, la que denominamos Estefanell, en Baldomero Vidal y Estefanell y la que llamamos 25 de Mayo, cerca del muelle de alto nivel del puerto”.
“Las estaciones de bombeo toman el agua de esa cuenca residual, que llega por gravedad hasta el punto de vertido común” en el colector, “para en un futuro, cuando esté operativa la planta de tratamiento a construirse, ser enviadas a otra estación de bombeo, que se denominará pozo cero, para desde allí llegar a la planta de tratamiento”.