La Leucemia Linfocítica Crónica (LLC) –un tipo de cáncer sanguíneo y medular con mayor frecuencia en adultos– manifiesta en Uruguay una incidencia de cinco casos cada 100.000 personas y los avances científicos presentan nuevos medicamentos y terapias con efectos secundarios menores a los tratamientos convencionales.
La Dra. Victoria Remedi, hematóloga del Centro de Hematología y Transplante del Hospital Maciel –centro de referencia para ASSE de la especialidad hematología– explicó que esta enfermedad oncológica registra en Uruguay 146 casos al año, con una incidencia de 4,2 por cada 100.000 habitantes. La incidencia es mayor entre los hombres y mujeres con una relación de 1 a 1,16 y es la enfermedad crónica más frecuente en adultos, con un promedio de edad en torno a los 73 años.
SÍNTOMAS
Es una enfermedad que “se puede diagnosticar en pacientes asintomáticos, por un simple hemograma. Cuando se presentan más de 5.000 linfocitos, hacemos otros estudios para saber si son clonales o patológicos y pueden evolucionar por otros motivos. Pero si se mantienen, se puede diagnosticar la LLC”.
Explicó que “otras veces se presenta en la forma de ganglios chicos o anemias, siempre con esa linfocitosis –elevado nivel de linfocitos– en la sangre”.
TRATAMIENTOS
En el mundo, la incidencia de los nuevos casos es similar entre las poblaciones de Estados Unidos y Europa, pero diferente a la asiática, en tanto existe un componente de raza y composición genética para sustentarla.
En este escenario, lo nuevo que se ha visto son los avances en el tratamiento. “En Uruguay, ofrecemos a los pacientes de ASSE el mismo tratamiento que en la salud privada. Todos los hematólogos nos guiamos por guías internacionales, gracias a dos situaciones. Primero, es el Fondo Nacional de Recursos (FNR) que nos ha brindado la capacidad de tratar con fármacos caros”, dijo Remedi a EL TELEGRAFO.
La especialista enfatizó que el FNR “brinda de forma universal los tratamientos de alto costo y altamente especializados. Eso es destacable porque es un ejemplo a nivel internacional y es para toda la población, tanto si pertenece al prestador público o a privados”.
Explicó que “algunos fármacos nuevos, recientemete introducidos, aún no estaban actualizados en el FNR y los hematólogos lo hacemos a través de recursos de amparo, pero se encuentra en vías de actualización. Hasta hace unos años, el tratamiento utilizado de quimioinmunoterapia tenía efectos adversos, como la caída del pelo y la tolerancia un poco complicada con fármacos dirigidos a las células que enferman”.
En la actualidad, tanto a nivel internacional como en Uruguay, “se hacen terapias dirigidas con fármacos que inhiben, o sea, actúan sobre receptores o proteínas de las células malignas y de esa forma la obstruyen. Son anticuerpos dirigidos directamente a la célula maligna, generan mucho menos efectos adversos, un mayor nivel de sobre vida y menos niveles de recaída”.
Remedi precisó que “la LLC no es curable, pero se prolongan los períodos de remisión y es controlable. Hay un tercio de los pacientes que nunca va a requerir tratamientos por la presentación indolente. Otro tercio se diagnostica inicialmente, es indolente y puede evolucionar a una enfermedad más agresiva que requiera un tratamiento. Y el otro tercio, requiere tratamiento porque se manifiesta de manera agresiva”.
El universo de pacientes atendidos proviene “mitad de Montevideo y mitad del interior del país, que llegan al Maciel por tratarse de un centro de referencia. En noviembre tendremos un Congreso Latinoamericano de LLC en Punta del Este que reunirá a expertos internacionales y nacionales. Permite una formación continua y estar en comunicación con los fármacos de primera línea”.
Porsaleu
En 2001 se creó la Fundación por la Salud del Paciente con Leucemia o Linfoma (Porsaleu), que brinda apoyo integral y gratuito a pacientes del interior del país que sufren de leucemia, linfomas u otras enfermedades graves de la sangre, así como a sus familiares.
Uno de los principales servicios es el alojamiento en su hotel solidario, destinado a usuarios que llegan a Montevideo para recibir su tratamiento en el Hospital Maciel. La fundación cubre las necesidades durante su estadía, con apoyo material y emocional a los usuarios y sus familiares. Esto incluye acompañamiento durante el tratamiento médico, asistencia sicológica y otros recursos para enfrentar la enfermedad. Porsaleu está conformada por voluntarios, cuenta con un Consejo de Administración que supervisa sus actividades y comisiones dedicadas a la gestión de la residencia, la organización de eventos y el asesoramiento médico.
“El residencial está cerca del Maciel para facilitar los controles a los pacientes o alojarse sin pagar nada por tratamientos de terapias dirigidas y se sostiene a través de donaciones voluntarias de un grupo de damas”, informó Remedi.
La fundación se encuentra en Buenos Aires 454 esquina Misiones. Por mayor información, los interesados pueden comunicarse al 2915 4270, vía e-mail a porsaleu@porsaleu.org, o a través de su sitio web.