Un hombre de 26 años fue imputado luego de varias denuncias de sus familiares por ejercer hechos de violencia debido a su consumo de drogas, además de violar las medidas impuestas de no acercamiento.
Según el parte emitido por Jefatura, los episodios de violencia comenzaron en julio de 2024 cuando éste agredió en reiteradas oportunidades a su madre, ya que tenía problemas con el consumo de drogas, solicitándose el retiro del domicilio. En diciembre pasado, en tanto, la víctima pidió nuevamente la presencia de la Policía ya que el muchacho había incumplido la medida y había intentado ingresar por la fuerza al domicilio, bajo los efectos de la droga.
Igual situación ocurrió en los primeros días de enero. Al arribar los efectivos del Área de Respuesta Policial constataron que H.D.M.M., se encontraba dentro del domicilio y estaba violento con su familia. Con autorización de la dueña de casa, los efectivos entraron para dialogar con el denunciado y lo encontraron realizando rituales religiosos. Tras desoír el pedido de los agentes, el hombre reaccionó de manera agresiva, por lo que debieron reducirlo.
Ante esto, la Fiscalía de Turno dispuso que se intime al indagado al estricto cumplimiento de la medida cautelar. A su vez, el Juez de Familia dispuso que habiéndose recabado el consentimiento de la víctima y atento a la gravedad de los hechos se resolvió su ingreso al sistema de monitoreo electrónico, en un lapso de 180 días por un radio de exclusión de 500 metros.
Sin embargo, al día siguiente de la medida, la Policía fue advertida por el Sistema de Monitoreo que éste estaba nuevamente incumpliendo. Al lugar concurrieron efectivos de la Comisaría Quinta y del Grupo de Respuesta Táctica, quienes lo detuvieron de inmediato.
Puesto a disposición de la Justicia, se resolvió la formalización de la investigación de H.D.M.M., quien fue imputado y condenado por “cuatro delitos de desacato en régimen de reiteración real”, imponiéndole la pena de cuatro meses de prisión en régimen de libertad a prueba.
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