Por primera vez en 35 años, Paysandú no tendrá Reina de Carnaval, de acuerdo con la decisión tomada por el grupo de funcionarios municipales que integran la Comisión de Carnaval, que este año no integra a fuerzas vivas o carnavaleros de experiencia. La presidenta del grupo y coordinadora de Cultura, Rosina Giamberini, confirmó que “decidimos no hacer más el concurso de la Reina de Carnaval, o de representante de carnaval teniendo en cuenta varias consideraciones”. Explicó que “no generaba nada tener o no tener reina. Las elegidas pasaban sentadas mirando el espectáculo y nada más. Pero además, en los tiempos que corren, un concurso de belleza nos parece que es un acto de violencia contra la mujer cuando crecen los feminicidios. No estamos dispuestos a generar este tipo de exposiciones”.
No obstante, la decisión impulsada por Giamberini causó otro enfrentamiento con la Asociación de Directores de Carnaval (ADAC). Su presidente, Horacio Lauría, subrayó que “queremos realizar el concurso tradicional, el de siempre, el de toda la vida”. Y agregó que “estamos de acuerdo con la inclusión pero no se puede hacer un concurso en donde en lugar de incluir se expone. Nuestro querido carnaval de Paysandú no es para experimentar y luego si da resultado transportar a otras festividades”.
“Es clarísimo que fue un fracaso total en estos dos años, no hay otra. Ahora se habla de tal y cual, pero la realidad es que no había casi aspirantes y que no concurría casi público al certamen. Hay que decir siempre la verdad. Esto fue un gran error. Pero el no hacer nada porque se equivocaron, no es el camino”.
Giamberini concordó en que los dos años del certamen inclusivo –donde se dejó de lado el concepto de belleza– de la Reina de Carnaval y de las Llamadas “no surtió el efecto que todos esperábamos”. Destacó el caso de “María Eugenia Guerrero, una chica trans, que trabajó durante todo el año con el tema y hoy es un destaque de una de las comparsas. Pero por el resto (de las y los elegidos) se sientan a mirar el carnaval; no tiene ninguna repercusión”.
“Quisimos modificar el concurso” a partir de una iniciativa de la Secretaría de Género, Generaciones y Derechos Humanos, pero “no encajó”, reconoció Giamberini. “Hubo pocas anotadas, un solo muchacho, muy desvirtuado y sin relevancia”.
“No me pesó tomar la decisión, todo lo contrario”, subrayó Giamberini. Destacó que se reinvertirán en el carnaval los 500 dólares destinados a premios. Pero ADAC, a través de Lauría, tiene una visión muy diferente del tema. “Queremos volver a la elección de la Reina. No discriminamos en lo absoluto. Es más, estamos totalmente a favor de un concurso paralelo. Pero la elección de la Reina de Carnaval debe volver a lo que siempre fue”.
Asimismo aseguró que “ADAC está dispuesta a tomar bajo su responsabilidad la elección de la Reina, pero claramente este año se nos vino encima el tiempo, ya no es posible hacerlo. Pero para el año que viene ya lo estamos pensando”.
Después que la dictadura prohibiera la celebración de carnaval, en 1977, en paralelo con la inauguración del Estadio Cerrado Municipal se pudo realizar un desfile de una scola do samba de Uruguayana. Fue el primer evento de carnaval en años. Desde el año siguiente, en 1978, se comenzaron a realizar desfiles de carnaval, con grupos de Montevideo, Concepción del Uruguay y Paysandú (Los Charoles y Las Turistas, entre otros). En 1984 el carnaval tuvo un nuevo impulso, con una reestructura total, la recuperación del Concurso Oficial (entonces en el Estadio Artigas) y de la elección de la Reina de Carnaval, a lo que acompañó una masiva participación de agrupaciones y público. En 2016 se introdujeron cambios en la concepción del concurso, que pasó a ser inclusivo en opciones sexuales, edad y físico. En 2018, tras el fracaso de este cambio, se determina no continuar realizando el concurso de Reina de Carnaval. En 41 años, es el primero que eso ocurre.