Cipup destaca logros en el puerto y obras en marcha; propuesta por un arco simbólico en avenida Brasil

Con renovado entusiasmo por los logros alcanzados con el trabajo de más de 20 años por la reactivación del puerto local y la hidrovía del río Uruguay, la Comisión Intersectorial pro Puerto Ultramar de Paysandú (Cipup) acomete el desafío de seguir trabajando por potenciar esta terminal logística. Entre las mejoras que se espera incorporar con el tiempo, se encuentran accesos terrestres, una vía férrea, mayor calado e infraestructura, destacaron a EL TELEGRAFO el arquitecto Rubens Stagno y la educadora Olga Flores, integrantes del grupo.
Sobre las acciones para lograr estos objetivos, Stagno comentó su propuesta –recogida en pleno por la Cipup– de llamar a concurso para la construcción de un arco en avenida Brasil de características similares al que se creó como símbolo de la histórica exposición de la agroindustria de Paysandú en 1948, que ha tenido receptividad en la Administración Nacional de Puertos (ANP).
Stagno refirió que “siempre habíamos pensado que uno de los depósitos portuarios se podía demoler, como efectivamente se ha hecho, pero el otro no, porque tenía incluso cierto valor histórico patrimonial, dado que es un edificio de 1930, con una arquitectura representativa de esa época. Además habían sido recluidos presos políticos en ese lugar, donde se había colocado una placa hace dos años e intentamos que no se demoliera”.
Subrayó que “la operativa portuaria ha tenido un gran crecimiento, el puerto está en pleno desarrollo y nos han dicho que es opinión unánime del directorio de la ANP y el cuerpo técnico que ambos depósitos tienen que ser demolidos”.
En este sentido, el arquitecto señaló que, como presidente de la Comisión de Patrimonio Cultural de Paysandú, mantuvo “una reunión con el arquitecto Néstor Fernández de ANP, a quien el presidente de ANP, Alberto Díaz, le hizo el encargo de concretarla. En esa oportunidad, se analizó tanto el tema de los depósitos del sector sur del puerto como las obras en curso en el viejo edificio de la aduana sanducera”.
Acotó que si bien aún no hay una decisión aprobada por el directorio en cuanto al segundo depósito (el primero ya se demolió), “es criterio unánime de los servicios técnicos y de los integrantes del directorio que es necesario ese espacio para la operativa portuaria. Se estudiaron posibles usos de los depósitos y se ofrecieron a los operadores portuarios, pero no se encontró interés alguno en ellos. Hoy luce abandonado, con ratas y palomas, aberturas que no cierran, en mal estado”.
“Por lo tanto, me he permitido sugerir, como se ha hecho en otros puertos del mundo –caso del puerto de Santander, que tuve ocasión de visitar–, que cuando la ciudad pierde por el crecimiento de la operativa portuaria –principal objetivo de la Cipup– que el puerto retribuya a la ciudad con otros bienes culturales al servicio de la sociedad”. En este sentido, sugirió “lo que fuimos complementando, armando y acordando conjuntamente durante la visita, que esencialmente contempla armar un esquema para la conmemoración de la Exposición de la Agro-Industria de 1948”. (Más información en edición impresa)