ING. AGR. RAMON APPRATTO LORENZO: “Salida del conflicto que afecta a la Caja de Profesionales requiere compromiso de todos”

Ramón Appratto Lorenzo, integrante de la comisión directiva de la Asociación de Afiliados a la Caja de Profesionales Universitarios (Aacjpu) y segundo alterno de la representación de los pasivos, formuló reflexiones sobre el conflicto que la entidad mantiene con sus funcionarios, que se ha extendido por más de un mes.
Destacó que las instituciones gremiales, representantes de los afiliados profesionales a la Caja de Jubilaciones y Pensiones de Profesionales Universitarios se dieron cita en la sede de la CJPPU a través de sus presidentes y delegados, que representan a más de 140.000 afiliados. En esa oportunidad, expresaron su voluntad de defender a la Caja en el conflicto que mantiene con sus funcionarios. Appratto aclaró que desde mediados de abril se ha abierto una discusión con los verdaderamente involucrados, es decir, activos y pasivos, no solo entre las cuatro paredes de la Caja, en reuniones sin acta, entre los directores y los funcionarios, donde quedan afuera quienes aportan.
A su juicio, el directorio no constituye una “patronal” en la acepción habitual del vocablo. Los representantes de los activos y de los jubilados, voceros sindicales no deben olvidar “su responsabilidad ante quienes, en elecciones siempre democráticas, han resuelto ponerlos allí para que actúen en su nombre. Estos representantes están, en general, comprometidos con plataformas electorales que les marcan el camino de la gestión a realizar”.
Sobre el conflicto, al informar sobre cuál es la postura de los representantes de los pasivos, dijo que al inicio de la presente administración el nuevo directorio tomó conocimiento del estado de preconflicto con el sindicato, obviamente “heredado” de administraciones anteriores y que “de acuerdo con la información que disponemos suponía la reivindicación de participar en una eventual reingeniería administrativa o informática. En síntesis, esto supone que el sindicato, por ejemplo, debe dar el visto bueno para cualquier modificación a la estructura funcional del organismo”.
Tras una serie de reuniones tripartitas (MTSS, mesa del directorio y sindicato) y algunas bipartitas (mesa del directorio y sindicato), “en general en buenos términos en cuanto a la relación personal, pero en las que los representantes sindicales fueron incorporando nuevos temas”. Al día de hoy, “reivindican el cabal cumplimiento de acuerdos, convenios y normas (subsidios maternales y paternales, reliquidación de IRPF por retroactividades y ascensos, y reliquidación por paros realizados), el fin de las tercerizaciones y la firma de un nuevo convenio salarial antes del 31 de octubre de 2018”.
Para Appratto es claro que “estas y cualesquiera otras reivindicaciones de similar naturaleza son por definición asuntos sindicales y cualquier sindicato está legitimado para asumir personería en su defensa. Pero, en este caso, es necesario aclarar que se agregan medidas de presión de diferente tenor”.
“De ellas, la más relevante por sus graves consecuencias económico-financieras en contra de la institución es el cese de actividad en el Departamento de Cuentas Corrientes. Esto tiene como consecuencia directa el entorpecimiento del ingreso de dinero en la Caja. No podrían hacer sus aportes todos los activos que deseen hacerlo. Esto, para no mencionar las dificultades supervinientes de todo orden, por el detenimiento de área tan sensible en la gestión de las cuentas corrientes de los afiliados”, observó.
“Frente a los planteos, creemos necesario ocuparnos responsablemente de su análisis y hacernos cargo de las posiciones asumidas, reivindicando –como lo hemos hecho hasta el presente– el tratamiento de los asuntos en sesiones, de las que quede el registro de lo actuado en actas”, acotó.
En relación con las medidas de “bloqueo” de los ingresos dispuestas por el sindicato, “nos parecen insensatas y poco perspicaces y las reprobamos. Sobre todo teniendo en cuenta que afectan seriamente los recursos y la imagen de la institución que –se dice– se pretende defender”.
“Igualmente nos resulta casi increíble que los responsables directos de la gestión administrativa, con sus conocimientos técnicos y recursos disponibles, no implementaran ni previeran otros procedimientos que aseguraran el flujo normal de dinero, sin interferencias. El directorio debería ocuparse seriamente del tema para identificar las responsabilidades del caso y actuar”, reflexionó el representante. “Finalmente, somos conscientes de que, en el devenir de las relaciones laborales y sindicales, pueden surgir diferencias que las partes no lleguen a resolver por sí solas. En ese caso, abogamos por que en el próximo convenio institución-sindicato, se acuerde instituir el procedimiento del arbitraje a cargo de terceros confiables, que aseguren el respeto a los derechos de todas las partes, en especial la solidez, buena imagen y confiabilidad de la Caja”, concluyó.