La edila nacionalista Prof. Gabriela Gómez cuestionó la gestión “sin rumbo” de la administración del intendente Guillermo Caraballo, oportunidad en la que entre otros conceptos expresó que “hacer obras, y obras de infraestructura, es prioridad de un intendente; diría que es la esencia del hacer de un intendente. El problema se presenta cuando estamos frente a la irresponsabilidad de la cabeza del ejecutivo departamental, el doctor Guillermo Caraballo. Irresponsabilidad para fiscalizar y controlar la habilitación de dichas obras, que en su mayoría -y esto es lo que más nos duele-, han sido realizadas con mano de obra privada”, destacó.
“Es decir, la Intendencia tiene un personal necesario para administrar la casa grande, y a su vez los vecinos con nuestros impuestos colaboramos y esperamos servicios, pero estos servicios se realizan a través de tercerizaciones con empresas privadas. Desde la Intendencia se me ha pedido prórroga para contestar el acceso a la información pública sobre el tema de obras, que estoy segura de que vence el 20, y vamos a tener esos datos para poder analizarlos”, agregó.
Reafirmó que “los vecinos pagan dos veces las obras con sus impuestos, cuando es obligación de la Intendencia hacerlas. Y no solamente esto, el problema se da cuando hay una incapacidad de gestión como pudimos ver -los videos los tengo- cuando cinco o seis familias de la calle Rodríguez Nolla y Ayacucho, han perdido todo. Llovió en la madrugada, y a las 5 de la mañana me estaban llamando. Quiero decir que me comuniqué con el ingeniero Marco García, él nos atendió -así que gracias, como siempre digo-, pero como él dice: no es su responsabilidad, la responsabilidad es del director de Obras y a través de él, del ejecutivo departamental, el doctor Guillermo Caraballo”.
Señaló que “estas familias han perdido todo, el agua llegó a la altura de 50 centímetros. Son cinco o seis familias. ¿Por qué? Porque los cálculos están mal hechos. Ahí tiene que tener responsabilidad… estoy segura de que el intendente le dirá a la empresa que arregle por su costo; los sanduceros no tenemos por qué pagar una obra tres veces”.
Asimismo, “si hacemos otra recorrida vemos que en calles Silverio Martínez y Entre Ríos se da la misma situación, incluso frente a una policlínica; familias que nunca han sufrido inundaciones y hoy, cinco o seis, se ven con ese problema. Lo más preocupante es que la cara visible, ya sea del doctor Guillermo Caraballo o de su responsable en Obras, el director de Obras no está presente. Ocurrió el martes a las 8 de la noche, luego de la tormenta, porque los vecinos me lo comunicaron. Después fui a hablar con ellos”, acotó.
Subrayó que al respecto ha habido cero respuesta, y que “el tema es más profundo aún cuando hablamos de los comerciantes ubicados en la peatonal, que acá hay compañeros de partido que han presentado mociones al respecto. ¿Y qué ocurre? Resulta que estos vecinos están pidiendo, por favor, una respuesta, porque con el acceso de la nueva peatonal también erraron en los cálculos de los desagües -no soy ingeniera ni nada por el estilo, soy práctica–. Lo que hago es transmitir lo que dicen los vecinos. Hay un problema muy grande en el tema de infraestructura de las obras”.
Pidió que la Comisión de Obras y Servicios de la Junta Departamental “se avecine, esté en el lugar de esos vecinos, para que vean in situ la problemática que están pasando. Voy a pedir también que la Comisión de Obras y Servicios haga un seguimiento a los distintos trabajos que está haciendo la Intendencia, porque es nuestra responsabilidad, como órgano de contralor, estar presente, y que los vecinos nos vean, a los tres partidos políticos, trabajando en conjunto por los problemas de la gente”.