La torrencial lluvia caída sobre el departamento en la víspera, principalmente en la ciudad, y la tormenta eléctrica que también trajo rachas de viento, causó la saturación de desagües pluviales, la inundación de varias casas –sin representar mayor riesgo para sus moradores–, y el corte de energía eléctrica en localidades del interior y en diferentes barrios de nuestra ciudad. Tan solo en la mañana, según indicó el presidente del Cecoed, Marco García, “cayeron más 70 milímetros en menos de tres horas y rachas viento fuerte de más de 100 kilómetros por hora”, lo que hizo que gran parte de la ciudad se viera afectada. “No quedó calle sin anegarse”, dijo. Eso sumado que en la tarde, pasadas las 16.30, hubo otra torrencial lluvia y tormenta eléctrica.
En tanto, a las 19.30, Paysandú era el departamento con mayores clientes afectados ante la falta de corriente eléctrica, constatándose 5.390 denuncias a través de los números 0800 1930 (desde teléfono fijo) y *1930 (a través de celular). De los 46.713 clientes registrados en la zona, esta cifra de afectados corresponde al 11,54%. El Instituto Meteorológico Uruguayo (Inumet) había emitido en la mañana una alerta naranja, que permaneció hasta la noche.
Asimismo, hubo varias localidades del interior que se encontraron sin salida de sus hogares, debido al desborde de arroyos, como fue el caso de Colonia Juncal, en las cercanías a Guichón. Los reclamos de Piedras Coloradas, Tres Árboles, Morató, Guichón, Piñera, Beisso y Colonia Juan Gutiérrez fueron realizados por la alcaldesa de la zona, Lourdes Suárez, quien luego comunicó a este medio que algunos casos habían sido solucionados y se debían a un problema en la reductora de Algorta.
Algunas zonas de la ciudad también registraron corte de energía, según consignaron al Facebook de EL TELEGRAFO: avenida Soriano y José Pedro Varela, Nuevo Paysandú, bulevar Artigas y Ciudad de Young, Brandao Sosa y Ciudad de Young, Barrio Norte, Barrio Sueños Cumplidos, entre otros, que con el correr de las horas fueron regularizándose. Fotografías y videos invadieron durante toda la tarde las redes sociales, principalmente Facebook y WhatsApp, dando a conocer las diferentes situaciones presentadas en la ciudad. Incluso, algunos videos mostraban la dificultad de los vehículos para transitar por la calle, ya que eran arrastrados por la fuerza de la corriente.
No fue menor la situación ocurrida en la Escuela 88, donde se filtró el agua a la sala de acceso al local y debió concurrir Bomberos para poder desagotar. El problema, según indicaron a este medio, se debe al desagüe y se recomendó, por parte de Bomberos, cortar la energía eléctrica para evitar riesgos mayores. En tanto, desde la Inspección Departamental de Primaria se autorizó al retiro de los alumnos mediante firma de sus responsables y “se hizo presente la arquitecta residente para evaluar los riesgos y demás”, dijo la inspectora Liliana Pereira.
OBRA PERTENECIENTE A OSE
Respecto a una obra que sufrió derrumbe de material y vio ampliado su diámetro, ubicada en Ledesma entre Leandro Gómez y Sarandí –frente a la Escuela de Policía–, el ingeniero Víctor Cestau de OSE dijo que había sido la única afectada por la corriente.
“Estaba abierta la calle en Ledesma porque estamos esperando unos caños de diámetro especial y antes que se sustituyeran la lluvia causó el desmoronamiento del costado de la zanja. Pero ya estamos esperando que mejore el tiempo para poder entubar eso y resolverlo. Ese fue el último inconveniente que tuvimos, digamos que nos hayan reportado. Después con las otras obras no tuvimos problemas”, indicó.
En la tarde “estábamos colocando equipamiento nuevo y nos agarró la tormenta de nuevo pero no hubo ninguna afectación mayor”, sostuvo. → Leer más