El Programa de Educación Sanitaria para el Niño Asmático y su Familia, de Comepa, recibió un reconocimiento por buenas prácticas, otorgado por el Ministro de Salud, Jorge Basso, y el representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en Uruguay, Giovanni Escalante.
De un total de 101 postulaciones de servicios del sector público y privado que desarrollan buenas prácticas en el primer nivel de atención, el Ministerio de Salud Pública (MSP) y la Organización Panamericana de la Salud eligieron 15 destacadas y entregaron otras 15 menciones especiales. El tribunal de selección incluyó a representantes del ministerio, de la Facultad de Medicina y las distintas cátedras que trabajan en el primer nivel.
En Paysandú, el Programa Esnayf (Educación Sanitaria para el Niño Asmático Y su Familia), que el MSP reconoció como “buena práctica de salud en resolutividad del primer nivel”, comenzó a funcionar en Comepa en marzo de este año. El programa responde a la necesidad, evaluada desde el servicio de pediatría, de abordar el tema del niño con asma desde otro lugar, con la incorporación de su familia como primeros actores en la prevención, tratamiento y seguimiento de la enfermedad.
Prevalencia del asma
El asma es una enfermedad crónica muy frecuente, en tanto los datos estadísticos muestran una prevalencia de 20% en la población y se incrementan las consultas en los servicios de urgencia a causa de exacerbaciones sobre todo en los meses de invierno, tanto en la población infantil como en adultos. La calidad de vida del niño asmático y de su familia se ve menoscabada por la frecuencia de las crisis (ausentismo escolar, privación de realizar deportes, mala calidad de sueño, entre otros).
El objetivo de este programa es brindar al niño asmático y su familia, herramientas para prevenir las exacerbaciones, reconocer los síntomas en forma precoz, y actuar en consecuencia con el inicio de un tratamiento en forma inmediata.
Funcionamiento
El Esnayf se conforma por un equipo interdisciplinario de dos Licenciadas en enfermería, dos Pediatras, dos Licenciadas en Fisioterapia, y una Auxiliar de Enfermería. Funciona los viernes a las 15 horas en la base ubicada en la zona Norte, con pacientes derivados por su pediatra. Allí se efectúa un taller interactivo y grupal, donde se conversa con las familias sobre los aspectos más relevantes de la enfermedad, su origen, reconocimiento de síntomas, desencadenantes que pueden ser evitados, uso correcto de la medicación y de la técnica inhalatoria. Este último es un aspecto fundamental, dado que se conoce que la falla en el modo de realizar las inhalaciones es la primera causa de una mala evolución y de un pobre control de la enfermedad. Las licenciadas en Enfermería realizan los registros de cada caso, con controles clínicos de Pico flujo espiratorio y saturación de oxígeno, supervisan la técnica inhalatoria, y entregan a cada familia una carpeta con materiales educativos y una planilla para registrar los eventos hasta la próxima consulta.
A continuación el pediatra tiene una entrevista personalizada en la que se conversa de ese caso particular, en consideración de sus antecedentes, desencadenantes, síntomas, frecuencia de las crisis, diagnóstico y dudas que hayan surgido de la charla. Se propone un tratamiento y se da nueva cita para evaluar la respuesta.
Las licenciadas en Fisioterapia trabajan con los niños en técnicas respiratorias y ejercicios para repetir en casa, para ayudarlos a controlar sus crisis. Se realiza, además, una encuesta de satisfacción del usuario, con una muy buena evaluación del servicio.
Desde marzo hasta la fecha han ingresado al programa 115 pacientes, de los cuales la mayoría ha evolucionado en forma positiva, con una menor frecuencia de los síntomas, controlados en domicilio con seguridad y sin temor. El equipo reconoció que este programa comenzó en Salto por iniciativa del profesor Dr. Osvaldo Bello, donde se capacitaron y obtuvieron las herramientas para instalarlo en Paysandú.
