Algunas causas
Ayer 25 (por el 25/12), nacimiento o nueva vida para el hijo de Dios, o simplemente Navidad para los creyentes.
Como tantos días al año pude ver esta Navidad gente comer o ingerir de las bolsitas de nylon sacadas de las volquetas alimentos o sobras de alimentos, que son tiradas para los chanchos, que a veces ni los chanchos las comen y quizás para estos uruguayos es un rico almuerzo diario.
Hace unas dos semanas vi a dos señores de unos 70 a 75 años romper una bolsita sobre la misma volqueta e ingerir ese alimento que aparentemente no estaba muy sabroso que se diga, dado la cara que hicieron al ingerirlo; estaban a 4 cuadras del centro. Tristemente seguí mi camino pensando qué rico soy porque todavía como mi pan sobre mi sagrada mesa, sin dejar de pensar cuánto tiempo tardaré en juntarme con los que ya comen de las volquetas.
¡Busqué causas! Quizás soy yo dije; pero no, si yo no soy nadie, ¡si yo no existo!
Busqué, política, social o moralmente, quizás por acá hallaba algo. Quizás no lo justo pero algo encontré: ¿Se acuerdan de la defensa de la heroica o toma de Paysandú? ¿Qué gritaba el héroe nacional Gral. Leandro Gómez, mientras lo fusilaba el coronel colorado invasor Venancio Flores junto a los brasileros? “Sin autonomía no hay libertad ni independencia”, gritaba el General mientras lo asesinaban.
Hoy diría.. No, mejor, hoy dicen los Venancio Flores: “descentralización sí, autonomía no” y a los hechos me remito. Todo lo manejan los Venancio Flores de Montevideo.
Todos los días asesinan a más Leandro Gómez o a Paysandú y a los hechos me remito.
Más para acá en el tiempo encontré al Gral. Gestido golpeando un escritorio enfurecido diciendo a toda voz que era una vergüenza para el Uruguay que su vicepresidente fuera preso por traer en el Tacoma contenedores contrabandeados. Hoy sería “formalizado”.
¿Se acuerdan que a los 4 días muere o lo mueren a Gestido?
Ayer al igual que hoy se blindaron los muchachos, formaron una caparazón y aquí no pasó nada; todavía nadie comía de las volquetas, había fábricas que producían alimentos y daban trabajo, la gente era feliz. Entonces ¿quien quedó de presidente? ¡Díganlo ustedes!
Claro, tuvieron que terminar abrazados del pescuezo de los militares a los cuales les entregaron el gobierno para que Wilson no los “formalizara” a todos juntos.
Cuando Paysandú, Uruguay y el mundo necesitan fábricas que produzcan alimentos porque hay 700 millones de personas con hambre, aquí, desde que volvieron los políticos en el año 1985, las estamos cerrando. Los mismos políticos cara dura que piden que los voten y después escupen las manos de los votantes que les dan de “comer” o le dan el voto.
¿Se acuerdan quién quería cerrar Paycueros? Y la remolacha azucarera ¿quién la terminó? Quien dijo “a mí no me ganan una huelga”, quien dice “a mí no me hagan huelga”. Hoy vemos los “camarandinga” llevar gente para todos lados, también vemos a los políticos almorzar opíparamente con los dueños de los “camarandinga” y algún “jefe” sindical. Una ministra dijo algo muy cierto, somos ignorantes, y yo digo haga usted 100 mil copias del libro “Testimonio de una nación agredida” y repártalos en los liceos y verá uruguayos un poquito más instruidos. Los Venancio Flores nos siguen bombardeando y las volquetas dicen “te estamos esperando”.
Walter Hugo Mattiauda Scarpini
Solicitada
