Faltó “visión política y global” del Ministerio de Vivienda ante planteos de Fucvam

El próximo mes asumirá la nueva dirección nacional de la Federación Uruguaya de Cooperativas de Viviendas por Ayuda Mutua (Fucvam), luego de la última asamblea que renovó parcialmente sus autoridades. En la oportunidad, resolvieron que el 12 de julio, en el marco del Día Internacional del Cooperativismo, se movilizarán desde la plaza Libertad hasta Torre Ejecutiva, en reclamo de una respuesta a su plataforma e invitarán a las diversas modalidades cooperativas.
La presidenta saliente, Alicia Maneiro, evaluó “dos años intensos de reuniones” que comenzaron en 2018 con el presidente Tabaré Vázquez, continuó con la ministra de Vivienda, Eneida de León, y siguió con delegados ministeriales a raíz de la instalación de una mesa de negociación mandatada por Vázquez. En forma paralela, el movimiento organizaba asambleas, donde la masa de cooperativistas recibía información de las conversaciones con el Poder Ejecutivo.
“Realmente nos retiramos con la pena de no haber podido cerrar la negociación con el ministerio. En la última asamblea nacional salimos fortalecidos, con una decisión muy discutida pero tomada por unanimidad en el movimiento y es cómo seguir con la lucha. Porque toda la plataforma de la federación es importante y no solo el 2% de rebaja del interés hipotecario, que es la punta de lanza. Hay otra cantidad de temas a discutir con el gobierno que son vitales para las cooperativas”, dijo a EL TELEGRAFO.
Ante los resultados infructuosos, opinó que “no hubo una visión política y global desde el ministerio”, si bien los delegados aceptaron que “los números que damos son reales, que es posible analizar cómo salió esa tasa de interés de la órbita del ministerio y el trabajo de las cooperativas desde el 2008 para acá”.
Sin embargo, “el ministerio se puso en una posición –en cierta medida– caprichosa, que, honestamente, no entiendo. Creo que lo mejor que puede pasar –y más en este año– es volver a retomar el diálogo y analizar esos números. No habrá una solución de un día para el otro, pero hay un montón de variables que juegan en un año muy particular y hay que tener la visión más amplia”. Recordó que “el programa del Frente Amplio para el nuevo gobierno tiene todas nuestras reivindicaciones. No están redactadas exactamente como las decimos, pero deja la puerta abierta a la negociación, por eso no es entendible la posición del ministerio. Hay un poco de ceguera”.

El objetivo del subsidio

A fines de mayo, De León reconoció en Paysandú el planteo de la federación por la rebaja del interés al 2% e informó que realizaba “todo el estudio correspondiente para entregarlo a los precandidatos del Frente Amplio y que se pueda hacer algo para el período que viene”. La secretaria de Estado aseguró que más del 60% de los cooperativistas reciben el subsidio que posibilita pagar “una cuota muy baja, al punto que ni siquiera cubre el capital que se les presta”.
Consultada Maneiro, señaló que “no es un argumento válido” el hecho que no importe el valor de la cuota “solo porque está el subsidio”. La dirigente reconoció la validez de la herramienta, en tanto “es algo por lo que peleamos durante cuarenta años”. No obstante, recalcó que “si la cuota fuera más baja, habría mucha gente pagando la cuota entera. Eso haría que el dinero que se saca del Fondo Nacional de Viviendas, sea menor. No olvidemos de dónde toma los recursos el fondo y con una política de viviendas que ha incentivado mucho al cooperativismo –y eso es innegable– hay una realidad, y es que son finitos”.
Maneiro explicó la necesidad de “fortalecer el fondo y una manera es haciendo hincapié en la rebaja de la tasa de interés para bajar el subsidio, sacar el IVA para abaratar los proyectos y buscar la forma que el fondo logre más recursos”.
Explicó que el argumento del ministerio “es corto y asistencialista. A los cooperativistas nos gusta pagar porque tenemos el más alto índice de responsabilidad frente a la devolución de los préstamos. La morosidad más baja está en el sistema cooperativo”. El subsidio no fue reclamado “para que todo el mundo se subsidiara y pagara mucho menos de lo prestado. Peleamos por un subsidio para casos puntuales y situaciones difíciles de las familias. Son visiones diferentes y para nosotros es una herramienta muy valiosa, pero hay que utilizarla con muchísimo cuidado”.

Controles del Estado

La federación reclamó controles de la Agencia Nacional de Vivienda (ANV) a las familias que solicitan el subsidio, en tanto una “cooperativa está obligada a presentar determinada información, que analiza la ANV y decide el porcentaje de subsidio que le corresponde. Para que el subsidio realmente cumpla su función, creemos que debe visitar las cooperativas y las familias subsidiadas para ver si realmente sus condiciones de vida demuestran que necesita el subsidio”. En contraposición, “si no hay un control real, hay situaciones que se escapan. Eso es un peligro porque hay que cuidar la herramienta y no tenemos que hacerlo nosotros, sino el propio Estado con sus técnicos”, concluyó.