En Paysandú, 42.917 ciudadanos participaron de la elección interna y no obligatoria de los partidos políticos, lo que representó el 45% de los 95.444 que estaban habilitados para votar en los 269 circuitos que dispuso la Corte Electoral, de los cuales 184 fueron urbanos con unos 400 inscriptos cada uno, y 85 rurales, con hasta 350 inscriptos cada uno.
En todo el país había 2.678.031 uruguayos habilitados para votar, y participaron 1.076.821, por lo que el porcentaje de votantes fue del 40%. En las elecciones internas de 2014 el porcentaje de participación fue de 37%.
ALGUNOS PROBLEMAS POR DESCONOCIMIENTO
Aunque no hubo graves problemas en las mesas receptoras de votos, sí fueron denunciados algunos casos de mala praxis en circunstancias como el control de no permitir la entrega de listas o hacer propaganda a menos de 100 metros del lugar de votación, de no permitir a los delegados partidarios a ingresar al cuarto secreto a reponer listas, o el caso de una mesa donde para introducir el sobre, se levantaba la tapa de la urna, en vez de habilitar la ranura para que entre el sobre.
En estos casos, la Junta Electoral de Paysandú actuó para regularizar estas situaciones, que en el caso de la falta de listas en el cuarto secreto implica un impedimento a la libertad del ciudadano de elegir. En términos generales, estos problemas se vinculan al escaso conocimiento del reglamento de las votaciones por algunos funcionarios, pese a que tuvieron tres días para realizar los talleres donde se les explicaba el sistema.
Otro de los inconvenientes que se dieron es que en varios casos faltó alguno o hasta varios de los funcionarios titulares y suplentes de las mesas, y hasta hubo casos donde debieron disponer de funcionarios suplentes “a la orden” –sin mesa determinada– porque faltaron los que estaban nominados.
COLAS DE HASTA 5 HORAS PARA ENTREGA
Una situación llamativa se dio cuando, una vez culminada la jornada, al momento de entregar las urnas y los documentos en la oficina electoral, hubo demoras muy fuera de lo común, hasta el extremo que la recepción de las urnas y planillas terminó a las 7 de la mañana, más de 24 horas después que muchos funcionarios comenzaran con sus tareas. Según se indicó a EL TELEGRAFO por algunos integrantes de mesa que hicieron la extensa cola, el problema habría sido que al entregar la documentación, se encontraban diferencias que debían ser controladas en el mismo momento, y lo que en otras elecciones era un trámite de no más de tres o cuatro minutos, en esta última hubo casos en que se demoraron 10 o más minutos, lo que habría determinado casos en que las urnas entraran al local de la Corte Electoral después de una espera de hasta 5 horas, según testimonios.
HOY SE REÚNEN A EVALUAR
“Terminamos a las 7 de la mañana porque la organización estuvo un poco lenta”, reconoció a EL TELEGRAFO la presidenta de la Junta Electoral, Nancy Ghiglioni, quien informó que “mañana martes a las 14 comienza el escrutinio departamental”, mientras que “nos vamos a reunir con los demás integrantes de la Junta electoral para analizar el desarrollo de la elección”.
Sobre si hubo problemas graves en la jornada del domingo, dijo que “no, solamente algunos casos con las constitución de las mesas receptoras, e incluso algunas que se llegaron a constituir totalmente con suplentes a la orden, que son algunos que se convocan a estar en la oficina por cualquier eventualidad. Fue un caso en un circuito urbano donde faltaron todos los titulares y suplentes, y cubrieron los que estaban a la orden”.
Otro inconveniente menor se dio con el funcionamiento de las tabletas que estaban para registrar y trasmitir por Internet los datos de los votos, y “en los 269 circuitos hubo que cambiar cuatro, lo que en realidad muestra que el sistema funcionó bien”.
Reconoció que “lo que estuvo lento fue la entrega de las urnas, y es que había que entregar la urna, la tableta y distintos materiales y todos los registros hay que validarlos antes que se retiren el presidente y secretario de la mesa receptora de votos”. Dijo que “hubo algunas mesas que tuvieron dificultades, pero fueron ayudados por funcionarios electorales, lo que produjo la demora”.
Sobre que no hay antecedentes de demoras tan largas, dijo que “no, jamás, y tengo varias elecciones. Y además en una época del año muy inhóspita como para que la gente estuviera afuera esperando”.
NO PERMITÍAN REPONER LISTAS
Consultada en cuanto a qué se piensa hacer para que esa situación no se repita en la elección de octubre –aunque no haga tanto frío–, dijo que “obviamente que hay que solucionarlo, ya, mañana antes de comenzar el escrutinio lo vamos a analizar para de ser necesario hacer un planteo a la Corte, porque esta situación no se puede volver a dar. No podemos exponer voluntaria o involuntariamente, como en este caso que se dio esta situación, a la gente que tuviera que esperar tanto, pasando frío”. Sobre si la inexperiencia o falta de capacitación de los funcionarios al hacer los cierres de mesa, o las dificultades propias del procedimiento pueden haber afectado la entrega al constatarse irregularidades involuntarias, dijo que “eso aún no lo evaluamos, pero lo vamos a estudiar”.
Otra muestra de esa situación fue cuando la persona que presidía la mesa receptora no permitió a los delegados partidarios a reponer listas en el cuarto secreto, argumentando que debía esperar a que no hubiera nadie para votar –lo cual es ilógico porque puede faltar la lista que quiera votar uno de esos ciudadanos en la cola– y Ghiglioni reconoció que “eso sucedió en varios circuitos que recibimos la denuncia y tuvimos que solucionar yendo al lugar o por teléfono”.