La Ley de Gestión Integral de Residuos se terminó de aprobar en el paramento a mediados de setiembre y pasó al Poder Ejecutivo para su promulgación y posterior reglamentación. En ese contexto fue que se llevó a cabo en Paysandú la jornada “Innovación social y tecnológica, oportunidades en el marco de la nueva ley de residuos”, organizada por el Ministerio de Desarrollo Social, a través de la Dirección Nacional de Economía Social e Integración Laboral.
La elección de nuestra ciudad para llevar adelante esta instancia obedece a la intención de dar a conocer el trabajo que se está llevando adelante, en especial junto a la cooperativa de clasificadores Unidos por la Clasificación.
“Las experiencias en paysandú tienen las características deseables que debería tener un modelo de gestión de residuos en el marco de esta nueva ley”, enfatizó Esteban Charbonier, del programa Uruguay Clasifica, dependiente de la citada dirección.
“La ley incorpora por primera vez un capítulo de inclusión de clasificadores, por lo cual genera un escenario en el cual las oportunidades de trabajo formales en el sector van a estar aumentadas por el fomento de la recolección selectiva y el reciclaje”, planteó.
La jornada contó con un panel de apertura con una importante representanción institucional, ya que estuvieron los ministros de Desarrollo Social, Ana Olivera (interina) y de Industria Energía y Minería, Guillermo Moncecchi, así como el subsecretario de Vivienda Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, Jorge Rucks; también el intentende departamental Guillermo Caraballo y los representantes del sector cooperativo Juan Canessa (Cudecoop) y Gustavo Bernini (Inacoop).
FINANCIAMIENTO
El subsecretario Jorge Rucks afirmó que la nueva Ley de Gestión Integral de Residuos era una larga aspiración de la cartera. “Desde la administración anterior y en esta se trabajó en un proceso participativo. La ley que se generó y que el Ministerio propuso al congreso nacional” y destacó el proceso participativo en el marco de la cual se desarrolló el texto. “Es una ley que no surge de la visión tecnocrática del ministerio, que sí está presente y es muy importante, sino de un proceso participativo, donde se trabajó con los distintos actores que están involucrados, tanto públicos como con el sector privado, con quien teníamos una experiencia de trabajo a través de los circuitos limpios, con la Cámara de Industria, pero también con otras cámaras y otros sectores”, señaló.
El jerarca manifestó que la situación de los clasificadores constituía “una deuda social para con ellos, que esta ley por primera vez los incluye y hace del clasificador un actor central para la nueva ley” y enfatizó en la formalización, tanto de los trabajadores como del circuito comercial de los residuos reciclados.
Además destacó los procesos de subsidio que permitirá la ley, que prevé la creación de una tasa aplicable a los generadores de los residuos más contaminantes.
“Se establece una tasa que da a lugar a un fideicomiso que va a ser manejado por los gobiernos departamentales y el gobierno nacional, como forma de asegurar que a partir de los aportes que provienen de aquellos que generan los residuos de mayor contaminación al ambiente, el sector privado tendrá que pagar los aportes correspondientes a la incorporación de esos residuos al ambiente”, anunció.
A partir de esas tasas se generarán “las capacidades de un fondo de fideicomiso que le da las capacidades financieras a las intendencias para fortalecer sus propias capacidades y desarrollar proyectos que muchas veces tienen la limitación del financiamiento para funcionar”, dijo el viceministro.
El texto legal identifica a estos residuos más dañinos, entre los que Rucks mencionó los plásticos de un solo uso, que hoy son objeto de una campaña específica.
POLÍTICAS
El ministro de Industria, Guillermo Moncecchi, también sanducero al igual que Rucks, expresó su orgullo porque el departamento esté a la vanguardia en este tema, aunque recordó que “los caminos nunca son inmediatos, requieren políticas de mediano plazo”.
Señaló que estos son tiempos en los que se debe “integrar la agenda productiva con la agenda ambiental; ya se terminaron las épocas donde estaba de un lado el Ministerio de Industria defendiendo intereses contaminantes y de otro lado el Ministerio de Medio Ambiente. No, esto se tiene que trabajar integrado y así se trabajó la ley. Y por eso estas cosas llevan tiempo”.
Moncecchi agregó que “ver resultados es una gran satisfacción, porque quiere decir que las cosas que empezamos a pensar hace años se concretan en iniciativas que benefician a las personas”.
Además definió la aplicación digital que se presentó durante la jornada como una muestra de cómo se debe poner a la tecnología tiene al servicio de las personas, “y no al revés”.
La ministra de Desarrollo Social en ejercicio, Ana Olivera, destacó la presencia en el auditorio de representantes de grupos de clasificadores de residuos de 11 departamentos, que además de participar de la jornada desarrollaron un encuentro. Esto, dijo la jerarca, es un indicio de que “la experiencia será compartida por otros lugares”.
