Una mujer de 48 años y dos hombres, de 50 y 28, fueron condenados como responsables –en distintos grados de responsabilidad– del homicidio de Maximiliano Andrés Rodríguez Ayala, perpetrado en barrio Curupí el 19 de julio pasado.
Como se informara, el deceso se había dado como consecuencia de una balacera en plena tarde, en las inmediaciones de Setembrino Pereda y Diagonal 200. Según declaraciones de testigos a EL TELEGRAFO, ya era frecuente que dos sujetos arrojaran piedras a una de las fincas del barrio, donde hay un almacén en que también despacharían droga a consumidores de la zona. Su propietario, conocido como “El Conejo”, es un recurrente vendedor y negociante de este tipo de sustancias desde hace varios años. Incluso fue el principal protagonista del operativo Coyote llevado a cabo por la Brigada Departamental Antidrogas en 2015.
En este caso, Rodríguez Ayala y un compañero de andanzas llegaron a la vereda del almacén y lanzaron piedras contra la propiedad. En respuesta, “El Conejo” y su hijo los repelieron disparando con un arma calibre .22 y otro .32. Uno de los disparos alcanzó en el pecho a Rodríguez Ayala, en tanto otro dio en su compañero de 18 años.
De inmediato, vecinos y familiares de los heridos se comunicaron con la Policía y trasladaron a los dos muchachos al hospital, custodiados por personal de la Seccional Segunda y URP que –a sirena abierta– iban despejando el paso. El mayor de ellos ingresó sin vida al nosocomio, mientras el otro, herido en la espalda, quedó internado con diagnóstico reservado.
En el marco de las investigaciones del caso, la Policía detuvo a Mario González Montaña, alias “El Conejo”; a su mujer, Yenny Beatriz Almirón Miralla; y al hijo de ambos, Mario Jair González Almirón, quienes también contaban con antecedentes por receptación y distribución de estupefacientes, respectivamente. También incautaron las dos armas utilizadas en el hecho. Un día después de lo ocurrido, los sospechosos fueron formalizados por la jueza penal de Cuarto Turno, con intervención de Fiscalía de Primer Turno, y fueron enviados al INR local con prisión preventiva.
Por su parte, finalizado el plazo estipulado, la Justicia condenó a Mario González Montaña y Mario Jair González Almirón por un delito de homicidio en régimen de reiteración real con un delito de lesiones personales, en concurso formal con un delito de porte de arma de fuego por reincidente. A “El Conejo” se le impuso la pena de 3 años y 10 meses de prisión efectiva, y a su hijo 2 años y 4 meses. Asimismo, Yenny Beatriz Almirón Miralla fue condenada por un delito de encubrimiento en concurso formal con un delito de porte de arma de arma de fuego por reincidente, a la pena de 1 año y 4 meses tras las rejas.