La esclusa de navegación de Salto Grande, una obra postergada durante varias décadas

El histórico proyecto de navegación del río Uruguay prevé el funcionamiento de una esclusa de navegación en la zona de la represa de Salto Grande. Se trata de una obra hidráulica que permitiría vencer pronunciados desniveles de agua, elevando o descendiendo los navíos, como un ascensor, continuando la navegación.
El Complejo Hidroeléctrico de Salto Grande presenta una esclusa de navegación inconclusa, pero el propósito es prolongar la navegabilidad del río Uruguay en 144 kms aguas arriba de Concordia y Salto, trasponiendo la presa hasta Bella Unión (Uruguay) y Monte Caseros (Argentina) para embarcaciones de hasta 9 pies de calado.
El canal de navegación existente, previsto para la operación en el futuro de una esclusa en la represa de Salto Grande, cuenta con un sistema doble de paneles de cierre estáticos cuyo trabajo culminó en 2010.
La esclusa en la presa (esclusa Ayuí), el caudal de navegación y la esclusa de aguas abajo permiten salvar tanto el desnivel creado por la presa como las restingas de Salto Chico, sin necesidad de derrocar en el río, ya que va paralelo al curso de agua.

ESTABA PREVISTA, PERO NO SE HIZO
El decreto 285/978, que complementó el que brindaba exoneraciones a la construcción de la represa de Salto Grande, ya preveía en su artículo 7 que “Las obras que se necesitaren para la navegación aguas arriba de la presa constituidas por la esclusa de Ayuí, con sus equipos electromecánicos, el canal de navegación, el puente canal y la esclusa en Salto Chico con sus equipos electromecánicos, que serán costeadas en la proporción que determine la Comisión Técnica Mixta, conforme a su probable utilización por cada país, teniendo en cuenta sus respectivas zonas de influencia, extensión del litoral fluvial y tráfico probable”. Sin embargo, solamente se construyó la esclusa Ayuí.
Para completar las obras que permitan la navegación, se deberían hacer un canal de 13 kilómetros de largo y 60 metros de ancho y dos esclusas para salvar el desnivel de 33 metros entre el embalse de la represa y el río Uruguay frente a Salto. Esto permitiría navegar embarcaciones de hasta 9 pies.
En 2010, se realizó el cerramiento de la esclusa, ya que aguas arriba permanecía abierta y era un riesgo para la seguridad. En esa época, se colocaron cinco tableros de acero, tipo compuertas, que tienen 25 metros de largo por 2,60 metros de ancho y hasta 4 metros de altura.

LOS ÚLTIMOS INFORMES
Un informe de la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande fechado en 1988, establecía dos posibilidades de habilitar la navegación, uno utilizando la esclusa actual y haciendo navegable el río hasta Salto Chico para barcazas de hasta 600 toneladas, por lo que la altura de la esclusa, el canal de navegación y la segunda esclusa sería de unos 18 metros con una base de 24 metros, mientras que el largo rondaría los 13 kilómetros. En 1988 se estimaba que la obra demoraría unos 36 meses en concluirse, trabajarían 1.500 obreros y costaría unos 79 millones de dólares de aquella época.
La segunda propuesta era hacer otra esclusa aguas abajo con caída de agua para generar energía que aumentaba sensiblemente los costos a 650 millones de dólares y el tiempo a seis años.
Más recientemente, en 2017, se realizó un informe en el marco de la Unasur (Unión de Naciones Suramericanas, ahora desaparecida) que establecía el costo de la esclusa y el canal (sin generación) en 300 millones de dólares.