Para el entrenador de la selección Sub 15 de Paysandú, Carlos Cabillón, el título conquistado el sábado en el Estadio Artigas ante Florida se sumó al logrado en abril pasado con el principal combinado de la Blanca. Dos copas nacionales de OFI en ocho meses no se dan todos los días.
“Tenemos la satisfacción del deber cumplido. Cuando nos preparamos lo hacemos para ser campeones. Siempre nos fijamos ese objetivo porque veía que tenía plantel, que había jugadores de riquísima calidad”, comenzó diciendo Cabillón, quien recordó que de los 14 partidos que jugó la Sub 15 en el campeonato, ganó 10, empató tres y perdió solo uno, el de la primera final contra los floridenses. “Fue una gran campaña y que creo que somos justos ganadores del campeonato”.
Respecto al segundo partido ante Florida, en el que Paysandú se impuso por 2-1 en los 90 y por 2-0 en el alargue, el DT manifestó que se dio un primer tiempo “muy trabado y disputado”, ante un equipo que “defiende bien” y que basa su juego en ese aspecto. “Con el ingreso de (Walter) Carbajal mejoramos en el juego. No quisimos largarlo de entrada porque venía de una recuperación y confiábamos en llegar al alargue”, acotó. Paysandú abrió el marcador en el complemento, pero luego la visita igualó. Ya sobre la media hora, Carbajal ponía el 2-1. “Después de ahí los superamos físicamente; se notó el gran trabajo del profe (César Moreira) que otra vez hizo que un equipo corra 120 minutos. En el alargue hubo un equipo solo y pudimos haber convertido más goles”, analizó Cabillón. “Estoy contento por el octavo título que consigo como entrenador. Este 2019 ha sido un año soñado: dos veces campeón del Interior como cabeza de un cuerpo técnico. Esto demuestra que en Paysandú hay material y se trabaja con responsabilidad”, continuó el entrenador. “Como siempre digo: la más linda quedó en casa. Así que a disfrutarla”, concluyó.