El campeón uruguayo de rugby en 2018 no pudo repetir ese éxito en 2019, pero dentro de una temporada exigente y cargada de compromisos, hubo elementos positivos para remarcar y valorar. Trébol, que venía de ganar un título que le era esquivo desde hacía décadas, cayó en cuartos de final del pasado certamen nacional y tropezó en semifinales del Torneo del Interior B argentino, en el que también estaban puestas las ilusiones.
El entrenador Mateo Durán, no obstante, tiene claro que el equipo y el club avanzaron en un año especial donde defendían galardón y encaraban un más duro campeonato en la vecina orilla, porque mejoraron en el juego y en la calidad del plantel, aunque no se hayan logrado los objetivos deportivos planteados a principio del curso.
“En los partidos definitorios no nos salieron las cosas como esperábamos. No entramos bien y no se nos dio. Si no entrás muy concentrado y despierto, se te empieza a ir de las manos. En el argentino y en cuartos del Uruguayo nos pasó algo similar. No era el objetivo deportivo terminar a esa altura”, dijo Durán a EL TELEGRAFO al respecto de dos eliminaciones –que sucedieron en una semana– no esperadas.
En el Uruguayo de Clubes, Trébol perdió en cuartos de final a manos de Montevideo Cricket, mientras que en el Interior B de Argentina, cedió en semifinales frente a Palermo Bajo en Córdoba. El albiverde había arrancado en el Interior A, pero al concluir cuarto en la serie pasó a jugar el B.
“Eso no quita lo que se logró en el año, realmente estoy muy contento. Una de las premisas era jugar buen rugby y lo hicimos de buena manera todo el año. Lo hicimos por encima del año pasado: subimos un escalón en cuanto a volumen de juego, fuimos más peligrosos”, aseveró Durán quien seguirá al frente del plantel de Primera en 2020.
“Me quedo con un balance muy positivo. Jugamos un torneo argentino con un nivel bastante por encima del nuestro y competimos a la par con grandes equipos, algo que hace unos años resultaba impensado. Algunos partidos se nos fueron por poco, pero ganamos otros, como frente a Tucumán, que nos dejó una alegría muy grande”, insistió. En cuartos del Interior B, Trébol batió a Old Christians con holgura: “ganarles de esa manera, con mucha autoridad, fue muy reconfortante”.
Durán también sintió conformidad “con el rendimiento de todo el equipo, con la cantidad de jugadores que se foguearon en Primera División (más de 30 rugbistas utilizados); eso es muy importante para nosotros, con muchos chiquilines nuevos. Cerramos un año en el que valió la pena todo el esfuerzo de los viajes y demás, porque crecimos”.
El conjunto sanducero sufrió durante la temporada las bajas de Juan Pedro Rombys y Agustín Della Corte, afectados a la selección uruguaya que tomó parte del Mundial de Japón. Rombys volverá a Trébol en 2020 mientras que Della Corte defenderá a Peñarol en la profesional Superliga Americana de Rugby, al igual que otros dos del albiverde: Juan Manuel Rodríguez y Ezequiel Ramos.
“Es una realidad que se viene, hay que aggiornarse rápidamente. Nos va a chupar proyectos de buenas figuras y obliga a sacar más cantidad de jugadores. Por lo que hay que apretar más sobre el número de jugadores”, comentó Durán respecto a la movida profesional en el rugby. Y, como en todas las cosas, Trébol se preparará y encarará la próxima temporada con renovadas energías. Como lo afirmó el DT: para “mejorar y ser cada vez mejores”.