Ayer se recordaron los 40 años de la inauguración del Laboratorio Regional Noroeste de la Dirección de Laboratorios Veterinarios (Dilave) “Miguel C. Rubino” del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP).
Participaron del evento el director general de los Servicios Ganaderos, Dr. Eduardo Barre; el director de Dilave, Dr. Alvaro Nuñez; el secretario general de la Intendencia Mario Díaz; el director de la sede Paysandú del Cenur Litoral Norte, Dr. Liber Acosta y hubo una amplia participación de médicos veterinarios, jerarcas y funcionarios de las diversas reparticiones del Ministerio y productores pecuarios, en el mismo predio del laboratorio que tiene a su cargo el control en los departamentos de Paysandú, Salto, Artigas y Tacuarembó.
Rodolfo Rivero, funcionario del laboratorio desde su fundación, destacó a EL TELEGRAFO que hoy Dilave “tiene un laboratorio actualizado, con las capacidades tecnológicas necesarias y tiene gente muy preparada”, y que hubo un buen desarrollo tecnológico “porque es inexorable, si no la realidad te pasa por arriba. Hay que estar al día, logrando diagnósticos cada vez más sofisticados aunque hechos de manera simple, pero es como dijo un viejo profesor, `en ciencia, diagnóstico e investigación la plata nunca es suficiente´, pero de la manera que sea hay que seguir apostando”.
“SIEMPRE LOS DINEROS
SON CORTOS”
Similares conceptos fueron los del director general de Servicios Ganaderos del MGAP, Dr. Eduardo Barre, quien señaló a EL TELEGRAFO que si bien se ha desarrollado la investigación y control en Uruguay, fue “con dificultades. Siempre los dineros públicos son cortos, y hay que gestionar bien los recursos para que las diferentes áreas, dentro de lo que nosotros gestionamos, puedan tener sus recursos para ir trabajando adecuadamente. Si no innovamos, no vamos a tener un reconocimiento a nivel internacional, se queda el país, se queda la agropecuaria en este caso, y la población en general que es la que recibe los beneficios de la producción agropecuaria”. Afirmó que si ese concepto “no llega a una conciencia general de los políticos y de la población, no llegamos a buen puerto”.
Partiendo de la base que ese trabajo realizado hasta ahora ha sido el que posibilitó mejorar los buenos ejemplares vacunos en los campos uruguayos y lograr el aumento de las exportaciones, Barre dijo que “la primera traba para la comercialización a nivel mundial es la sanitaria y si no trabajamos bien con las enfermedades, están esas trabas. Segundo es la inocuidad, que también desarrollamos una importante actividad dentro de nuestro servicio veterinario y sobre todo en los centros Dilave, se investiga en inocuidad y se hace el diagnóstico, y también está bienestar animal entre los rubros que limitan la exportación”.
No obstante, aseguró que “Uruguay está muy fuerte en eso y debemos saber que hay que invertir en esas áreas para que el país pueda seguir en este rumbo”.
