“Cuando se le hace destete precoz a los hijos de las vacas flacas, los números dan, incluso en diferentes escenarios de precios, de terneros y de ración”. La frase del ingeniero agrónomo Alvaro Simeone refleja una inquietud de los productores que llevaron a hacer hincapié en la investigación que se lleva adelante en la Unidad de Produccción Intensiva de Carne (UPIC), y puesta a consideración en la jornada de verano realizada el jueves en la Estación Experimental Dr. Mario A. Cassinoni (Eemac).
El responsable de la UPIC estableció que la jornada permitió que “los productores vieran el seguimiento y los resultados parciales de la investigación”. Aclarando que el año pasado “hicimos un destete precoz con diferentes estrategias de alimentación, pensando en la recría. Y estuvo bueno porque llegaron productores y me dijeron cuales fueron los resultados del experimento que vimos hace un año”.
Para eso, en la actividad desarrollada con presencia de productores de diversos puntos del país, e incluso de Argentina, “brindamos espesor de grasa dorsal, área del ojo de bife, evolución del peso vivo, en tanto la faena será en el invierno, por lo que en la jornada de la UPIC de agosto vamos a mostrar los datos de carcasa y canal de esos animales”.
Para Simeone, que estuvo acompañado de todo el equipo que trabaja en la Eemac, “la frutilla de la torta es ponerle a todo eso una cuenta económica”.
Y lo explicó en un ejemplo de lo que puede suceder con un “productor prolijo”, con vacas en buen estado, pero que de 400 vacas, 70 pueden ser primíparas y algunas vacas flacas, que están en una condición corporal 3. “Esa vaca tendrá en el entorno de 40 a 45 por ciento de preñez, y si le hace un destete precoz se va a 90%”, sostiene el profesional.
La pregunta que hizo Simeone es: “esos 40 puntos de preñez, que van a transformarse en 35% de destete, ¿matan el costo de un destete precoz? O sea, si le aplico destete precoz a esas vacas, el ternero adicional que va a lograr, ¿es superior al costo?”.
“Si le doy una ración que cuesta U$S 400 la tonelada (carísima) y me gasto 120 kilos de ración, que es 1 kilo durante 120 días del destete precoz, me gasté U$S 48, con algo más de adicional y de manejo que se me vaya a U$S 60”.
“Pero cuando tengo 40 puntos de destete adicional, por 150 kilos, por U$S 2,50 que vale el ternero, tengo U$S 150, entonces me gasté 60 o 70 dólares, pero tuve U$S 150 adicional, por lo que tengo un margen adicional de U$S 80 por el par vaca-ternero”.
Explicó el docente y profesional de la Eemac que “esa cuenta no es al voleo, sino que es parte de monitorear la vaca. En diciembre o enero a las vacas flacas las tengo bien identificadas, entonces le hago destete precoz solo a los terneros hijos de esas vacas flacas. Esa cuenta realmente es impactante”, afirma Simeone.
EL PESO DEL NOVILLO
El principal de la UPIC comentó a EL TELEGRAFO que “he escuchado que dicen que el ternero de destete precoz, después se transforma en un novillo más chico. Y en realidad los datos aportados por la ingeniera agrónoma Victoria Burjel Bide, sostiene que el monitoreo de ese destete precoz hasta novillo, este ejemplar, no es solamente del mismo tamaño que el destete convencional, sino que un poquito más pesado todavía”.
Explicó que ese relato que se ha generado de que el destete precoz genera un novillo un poco más apunado, “no tiene fundamento. Hay un protocolo de manejo que debe hacerse, en donde el acostumbramiento es fundamental, y durante este acostumbramiento, que dura 10 días, cuando el ternero tiene 60 días de edad, es fundamental seguir el paso a paso y no improvisar”.
Este verano los dos destetes precoces que se realizaron en la UPIC, “fue con un monitoreo diario de cuanto consumían y haciendo doble pesada para tener datos bien precisos. Y los animales ganaron 240 gramos por día, que era lo que decía el libro de destete precoz en ganado de carne de hace 20 años atrás, que escribimos con la ingeniera agrónoma Virginia Beretta”.
NUTRICIÓN
Como en todo evento de la Unidad de Producción Intensiva de Carne, la nutrición tiene un espacio clave, y en especial “la suplementación invernal de terneros utilizando comederos de autoconsumo y el uso de DDGS, ha tenido una gran expansión y utilización de los productores”, sostuvo Simeone.
Se viene trabajando fuertemente en lo que se ha denominado “Nutrición programado”. Allí se evalúa el manejo nutricional del ternero y como puede afectar sobre la performance del animal hasta la faena y la calidad de carne”.
En el campo, “Victoria trabajó en un experimento en la que se procuró caracterizar el acostumbramiento de los terneros, y cual es la ganancia del destete precoz durante el acostumbramiento. Se compararon si hay animales livianos versus pesados, y animales con lotes desuniformes, versus lotes homogéneos”.
Se comprobó que la ganancia promedio durante el acostumbramiento de un destete precoz “es de 200 gramos”, puntualizó a EL TELEGRAFO la profesional sanducera.
Señaló que durante el acostumbramiento “el animal en los primeros dos días no recibe alimentos, solamente se lo mantiene con sombra y agua. Luego se les ofrece fardos de alfalfa, a razón de 1% del peso vivo, y se les empieza a suministrar el suplemento, de a 200 fardos por día, hasta llegar al 1% de peso vivo”.
LA JORNADA
La propuesta se desarrolló en el marco del proyecto Cuatro Estaciones en la UPIC, y se inició con una puesta a punto del director técnico del equipo de investigadores en el área, Álvaro Simeone, sobre trabajos desarrollados durante dos décadas, así como las líneas de investigación que se vienen desarrollando.
Posteriormente, la ingeniera agrónoma Victoria Burjel compartió datos sobre la alimentación diferencial entre los dos y seis meses de edad y su efecto sobre la curva de crecimiento en el ganado de carne durante la recría. Asimismo, Simeone presentó el experimento Uso de grano de lupino en la alimentación de ternero de destete precoz durante el verano.
Los asistentes tuvieron la oportunidad de apreciar en el campo el acostumbramiento en el destete precoz y conocer si en ese sistema los terneros pierden peso. Además, se mostró el manejo y productividad de las pasturas perennes durante el verano; el engorde de novillos a pasto durante esta época y se expusieron datos de utilidad para la planificación de la siembra de verdeos de invierno.
El énfasis estuvo puesto en dos aspectos: productividad de las pasturas y destete precoz. El primero remite a un proyecto que se desarrolla con el apoyo de la empresa Gentos y tiene como objetivo determinar si, efectivamente, el avance significativo que ha habido en la producción de las nuevas especies se confirma con los datos obtenidos en la Eemac.
El segundo, es un trabajo de largo aliento para el cual se utilizan diferentes estrategias sobre la performance futura al año y medio, edad en que el animal se faena, así como aspectos de implementación práctica, esto es “cómo realizar un acostumbramiento y si efectivamente lo que sostienen los técnicos en la publicación anual de la UPIC –en el acostumbramiento los terneros ganan 200 gramos y después pasan a ganar 600 gramos–, se da en la realidad.
Simeone, Burjel, Dainelis Casanova y Natalia Zabalveytia, realizaron las mediciones correspondientes y lograron comprobarlo. Si el protocolo se sigue y se aplica el destete precoz, se dan las expectativas de ganancia. “Esto es importante porque está la idea en el imaginario que la aplicación del destete precoz afecta la performance del ternero. Queda claro que ‘dato mata a relato’ y el dato es que éstos tienen mejor o igual performance que los terneros que permanecen al pie de la madre”, concluyó el investigador.
